- Grecia se enfrenta al pago de 1.600 millones de euros a finales del mes de junio
La falta de recursos económicos del país heleno y el nerviosismo entre la población que ha provocado la retirada del dinero de los bancos, hace inevitable que los dirigentes griegos se sienten a negociar con las instituciones europeas con el fin de llegar a un acuerdo. Los analistas no dan muchas alternativas a Grecia que aceptar las medidas que quieren imponerles.
Según recoge Financial Times en su edición digital Daniel Gros ha dicho que "aún estamos a cuatro o seis semanas para aplicar los controles sobre el capital griego".
Se verían obligados a sumir medidas antipopulares, como limitar la retirada de efectivo en los bancos por parte de los ciudadanos
Grecia se enfrenta al pago de 1.600 millones de euros a finales del mes de junio. En caso de no hacerse efectivo Grecia tendría que someterse al control de las instituciones monetarias. Se vería así en la misma situación que vivieron anteriormente Chipre y Argentina.
Tiene que ser el propio país heleno quien solicite estas ayudas por parte de Europa. Se verían obligados a sumir medidas antipopulares, como limitar la retirada de efectivo en los bancos por parte de los ciudadanos.
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Algunos analistas no comparten que aplicar las medidas que se le impusieron a Chipre vayan a funcionar con el mismo resultado en Grecia. El control del capital formaba parte del plan inicial de reestructuración que se impuso en el país chipriota. Comparan la situación helena con la que vivió Argentina en 2001, cuando el cambio de divisa produjo el desplome de la economía del país.
Friðrik Már Baldursson, economista del Universidad de Reykjavik ha comentado que "el gobierno tiene que convencer a los depositantes que pueden aportar su dinero en los bancos. Pero la credibilidad puede desaparecer muy rápidamente y se necesitará mucho tiempo para recuperarse ".
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