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La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia CalviñoEduardo Parra - Europa Press

El consejo de ministros ha aprobado la adenda al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia para ser enviada a la Comisión Europea. De su visto bueno allí depende recibir más de 94.000 millones de euros adicionales de los fondos europeos 'Next Generation EU'. En conjunto, se estima que las inversiones y reformas del Plan de Recuperación aumentarán en tres puntos el nivel de PIB de media hasta 2031.

Supone "activar la totalidad de los fondos europeos Next Generation EU y culminar el proceso de modernización de la economía española", señalan desde el Gobierno. Hay que recordar que España lidera el despliegue del Plan de Recuperación en Europa con la recepción de los tres primeros pagos por un volumen total de transferencias de 37.000 millones de euros.

En concreto, la adenda movilizará 10.300 millones de euros de transferencias adicionales de los fondos y el programa 'Repower EU' para reforzar los proyectos estratégicos (PERTE) e impulsar la autonomía estratégica en el ámbito energético, agroalimentario, industrial, tecnológico y digital.

A esto se suman 84.000 millones de euros en préstamos, que se canalizarán a través de los PERTE y de un conjunto de fondos que proporcionen una red de seguridad que permita mantener el impulso de las inversiones públicas y privadas. Además del ICO y otras entidades públicas, los préstamos se canalizarán a través de las entidades financieras y del Banco Europeo de Inversiones (BEI).

EL PLAN PUEDE LLEGAR A MOVILIZAR 160.000 MILLONES

En total, el Plan de Recuperación puede llegar a movilizar 160.000 millones de euros en el periodo 2021-2026, más del 12% del PIB de España, que se unirán a los 36.700 millones de euros de los Fondos Estructurales del marco financiero plurianual 2021-2027.

"Las inversiones y reformas de la adenda extenderán el impacto del Plan de Recuperación, tanto en términos de crecimiento y creación de empleo como de refuerzo del cambio estructural de la economía española que ya se está produciendo. En el actual entorno de incertidumbre internacional, el programa desplegado con los fondos Next Generation EU está permitiendo que España lidere por tercer año consecutivo el crecimiento entre los principales países de la Unión Europea", afirman desde el Ejecutivo.

Como detallan desde el Ministerio de Asuntos Económicos, los 10.300 millones de las transferencias adicionales se destinarán a reforzar los 12 PERTE que ya están en marcha.

Por su parte, el total de préstamos de los fondos a los que España puede acceder se canalizarán a las empresas y a la economía española a través de 14 fondos que permitirán establecer una red de seguridad y mantener el esfuerzo de inversión en los próximos años.

Además, los préstamos procedentes de la Comisión Europea permitirán una financiación sostenible a un menor tipo de interés que la obtenida por el Tesoro Público y largos plazos de amortización. Entre las novedades, destaca el Fondo de Resiliencia Autonómica, dotado con hasta 20.000 millones de euros para la financiación de proyectos de inversión sostenible de las CCAA.

Las empresas dispondrán de 22.500 millones de financiación para la realización de sus proyectos, especialmente en inversiones sostenibles, a través de los diferentes fondos que gestionará el Instituto de Crédito Oficial (ICO). Pondrá en marcha la Línea ICO-Verde, dotada con 15.500 millones para facilitar créditos a hogares y empresas públicas y privadas para la realización de inversiones que favorezcan la transición verde, como la generación de energía renovable, la eficiencia energética, la economía circular o la renovación de buques. También canalizará 7.000 millones a través de la nueva Línea ICO Empresas y Emprendedores, que se destinarán a financiar inversiones en el tejido empresarial en condiciones favorables.

El apoyo al tejido empresarial se completa con el Fondo Next-Tech, cuya dotación se amplía hasta los 4.000 millones de euros.

Por otro lado, el Gobierno crea un fondo específico dotado con 2.250 millones para financiar la bonificación fiscal de las inversiones de familias y empresas en transición energética.

También se constituye un fondo para el impulso de la vivienda social y de alquiler asequible, dotado con 4.000 millones, que tiene como objetivo incrementar el parque de vivienda en alquiler social o a precio asequible, así como mejorar el parque de vivienda ya existente.

TRES FONDOS PARA REFORZAR LOS MECANISMO DE COHESIÓN SOCIAL

Adicionalmente, se pondrán en marcha otros tres fondos que reforzarán los mecanismos de cohesión social. El primero, un Fondo de Impacto Social, dotado con 400 millones, dirigido a impulsar las inversiones de impacto social y medioambiental, como instrumento para reducir la desigualdad y la consolidación del Estado del bienestar.

El segundo, un Fondo RED, dotado con 3.000 millones, ya contemplado en la reforma laboral como complemento al Mecanismo RED, de estabilización y flexibilización del empleo. Y el tercero, un Fondo de Reforma de la Inclusión Social, para desarrollar y escalar las políticas de inclusión ligadas al Ingreso Mínimo Vital, dotado con 2.530 millones.

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