- Llevan participando en los partidos desde 1950
- Están consideradas como 'trabajadores temporales'
- Han denunciado a la liga en cinco ocasiones
26 de las 32 franquicias de la liga profesional de fútbol de Estados Unidos (NFL) cuenta con ellas. Las 'cheerleaders' han animado cientos de partidos y forman parte de los más de 15.000 trabajadores a tiempo parcial que la liga contrata durante sus meses de duración. Siempre aparecen impecables y sonrientes, pero su realidad es bien distinta.
El colectivo de 'cheerleaders' asegura que tienen que buscarse otros trabajo para compaginar porque no ganan lo suficiente y piden ser tratadas con la misma dignidad que el resto de trabajadores de la liga más lucrativa del mundo, informa El País.
“No diría que me arrepiento de la experiencia, pero sí que hubo tantos momentos bonitos como crueles”, señala una animadora
Pagas inferiores al salario mínimo, ausencia de la protección reglamentaria y horas no registradas son algunos de los problemas a los que tienen que hacer frente los trabajadores de la NFL. El carácter reivindicativo de las 'cheerleaders' no es nuevo; las jóvenes suman ya cinco demandas y Los Raiders de Oakland y los Buccaneers de Tampa Bay ya tienen que indemnizarlas con más de dos millones de dólares por deuda salarial.
“Trabajar en la NFL siempre había sido uno de mis sueños”, relata Tiffany, cheerleader de 2010 a 2014.“Ahora no diría que me arrepiento de la experiencia, pero sí que hubo tantos momentos bonitos como crueles” .
“Nadie se da cuenta del tiempo y esfuerzo que requiere. Juro que le echábamos más horas que los propios jugadores” , añade esta joven, tal y como recoge El País, que fue también animadora en el instituto y la universidad.
'TE OBLIGAN A PESARTE'
“No te sientes valorada y te imponen normas absurdas. Entiendo, por ejemplo, que quieran que mantengas una figura atractiva, pero te obligan a pesarte en los días de partido y si te pasas por un gramo, no te dejan salir del vestuario… No hay nadie que logre evitarlo siempre y es algo que te acaba marcando. Por eso apodamos el vestuario como ‘la sala de lloros’. Porque ahí nos quedábamos castigadas, llorando y viendo el encuentro por la televisión…”, relata Tiffany.
Desde 1950, las 'cheerleaders' forman parte de los partidos de la NFL, quien para ahorrarse los gastos de contratación siempre las ha considerado como “trabajadoras independientes”, algo que las jóvenes, con sus quejas, esperan modificar.
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