- Se combinan entrevistas con pruebas cognitivas
- Google ha sido reconocida como una de las mejores empresas para trabajar
Un puesto en Google es uno de los empleos más codiciados del planeta. La tecnológica ofrece unas condiciones y una remuneración que llaman la atención de miles de personas en todo el mundo. Además, en Mountain View se ha establecido como uno de sus principales pilares el conseguir que sus trabajadores se encuentren lo más cómodos posible. Pero llegar a incorporarse a la plantilla de esta compañía no es un camino fácil.
El vicepresidente de Recursos Humanos de Google, Laszlo Bock, relata en una publicación reciente cuál es el criterio de la compañía para seleccionar a sus empleados de entre los más de dos millones de candidatos que quieren entrar en este paraíso tecnológico.
Estos requisitos, que están recogidos en un artículo de Cromo citado por MBA, pasan por una serie de pruebas y entrevistas que destacan las habilidades y conocimientos de los candidatos. En este sentido, Bock señala en su libro “Work Rules!” que han creado el término 'Googleyness' para definir al conjunto de virtudes que hacen a una persona capaz de trabajar en Mountain View.
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SITUACIONES COMPLEJAS
De hecho, este concepto aglutina la capacidad de resolver situaciones complejas gracias a la curiosidad y a una capacidad de aprendizaje elevada. Además, Bock incide en que la mejor manera de ver qué puede ofrecer un candidato es hacer una entrevista con cuestiones lo más relacionadas posibles al desempeño que tendría dentro de la firma. Esta prueba refleja en un 29% las verdaderas habilidades del empleado.
Esta prueba refleja en un 29% las verdaderas habilidades del empleado
Pero la cosa no termina ahí. Las personas que quieren entrar en Google tienen que superar dos barreras más. Una, más compleja, pasa por una serie de pruebas cognitivas en la que se analizan determinadas habilitadas. Después, una vez resuelto este proceso, tiene lugar una doble entrevista.
La primera parte del cuestionario trata sobre cuestiones relacionadas con el candidato. Es una entrevista con preguntas conductuales en las que se proyecta la experiencia del candidato en los cargos que ocuparía dentro de la compañía en caso de ser seleccionado. La segunda parte de la entrevista es de temática más situacional. Se expone un problema y se pide que se resuelva.
Bock asegura que con este método cubren la mayor parte de las dudas que se pueden tener sobre una persona que se postula como futuro trabajador de Google. Además, también ha puesto énfasis en que hay una cantidad importante de preguntas más normales en las que se tienen más en cuenta las respuestas más originales y que más destacan con respecto a los demás.
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