Tras sembrar la polémica allá por donde pasa, Uber ha arrancado en Madrid. Después de operar en Barcelona desde el pasado abril, llega a la capital tras lograr una masa crítica de conductores suficiente como para que cualquier usuario que se conecte y pida un coche no tarde más de unos 10 minutos en recibirlo.
“uberPOP forma parte de una revolución global del transporte. En Uber, vemos un futuro en el que la gente usará menos el coche propio y apostará más por compartir vehículo, y por eso estamos construyendo hoy las smart cities del futuro”, dijo hoy Alex Droulers, portavoz de Uber.
LA APLICACIÓN MÁS POLÉMICA
Los servicios de transporte ofrecidos por Uber han generado una gran polémica en todo el mundo. España, Alemania y Estados Unidos han vivido sonoras huelgas contra la aplicación, aunque la compañía alega que no da cobertura a un servicio de taxi ilegal.
La compañía afirma que la regulación vigente sí permite la remuneración a un particular que efectúa un servicio de transporte siempre y cuando solo sirva para costear gastos. Uber fija este listón está en los 30 céntimos por minuto o los 75 céntimos por kilómetro, de los cuales un 20% van a aparar a la plataforma tecnológica.
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