• Sus defensores destacan que fomentará el crecimiento económico y el empleo
  • Sus detractores prevén menos derechos sanitarios y laborales
  • También anticipan un fuerte impacto medioambiental
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TTIP. Si esta expresión no le suena, le conviene seguir leyendo este artículo, ya que el nuevo tratado de libre comercio que negocian la Unión Europea y Estados Unidos podría cambiar su vida.

TTIP-ATCI

Hablamos del Tratado Transatlántico para el Comercio y la Inversión (ATCI por sus siglas en castellano y TTIP por sus siglas en inglés). Este acuerdo de libre comercio entre la UE y USA tiene grandes detractores y grandes defensores. ¿Pero cuáles son sus principales ventajas e inconvenientes?

VENTAJAS

La Comisión Europea calcula que la economía de los 28 gobiernos de la UE podría recibir un impulso de casi 120.000 millones de euros anuales con la firma de este nuevo acuerdo. Además, se prevé la creación de 400.000 empleos y un aumento del 0,5% en el PIB europeo.

Ignacio García Bercero, director del Equipo Negociador de la UE para el tratado sobre Comercio e Inversión con Estados Unidos, comenta que “es un acuerdo para liberalizar el comercio y las inversiones entre Estados Unidos y la Unión Europea. Podría tener un impacto significativo en el crecimiento económico y el empleo, a través de un incremento sustancial de las exportaciones de la Unión Europea hacia Estados Unidos”.

El objetivo, según la UE, es “eliminar las barreras al comercio, para simplificar la compraventa de bienes y servicios entre la Unión Europea y los Estados Unidos, sin rebajar el alto nivel de protección del consumidor europeo”.

“Si conseguimos que los procedimientos de aprobación en materia de obstáculos sanitarios sean más fáciles, habría una gran posibilidad para mejorar las exportaciones españolas”, añade García Bercero.

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INCONVENIENTES

La gran crítica que se le hace al proyecto de acuerdo es la creación de un tribunal de arbitraje, que estará compuesto por las grandes multinacionales y los Estados. Según ha declarado Lola Sánchez, eurodiputada de Podemos, al Huffington Post, el tratado “es nocivo en su totalidad salvo que seas una gran multinacional".

En su opinión, las grandes corporaciones podrían situarse “al mismo nivel” que los Estados. “Es el caballo de troya del acuerdo, un atentado a la democracia ¿Para qué votar si al final este tribunal puede decirle a un Estado lo que tiene que hacer?”, se ha preguntado Sánchez.

Los grupos de izquierda trabajan en una resolución para presentar ante el Parlamento Europeo, que exija un cambio en el diseño del tribunal de arbitraje. Por ejemplo, Matthias Fekl, secretario de Comercio Exterior de Francia, ha anunciado que el Gobierno galo no firmará el TTIP si se incluye la denominada cláusula Investor State Dispute Settlement (ISDS), según ha publicado 'euractiv.com'.

Esta cláusula está centrando el debate, porque permite a una empresa demandar la legislación de un Estado si considera que tiene un impacto negativo en su actividad económica. “Francia no quiere que la ISDS sea incluida en el tratado. Hay que preservar el derecho de un Estado a fijar sus propias normas, para mantener la imparcialidad del sistema de justicia y permitir a los ciudadanos preservar sus valores”, ha comentado Fekl.

Desde Alemania, también han mostrado su oposición a esta cláusula, que ha causado un parón en las negociaciones. Por el contrario, Estados Unidos ha insistido en que es una parte vital del TTIP. “Eliminar la ISDS de las negociaciones sería una señal muy negativa”, ha advertido Anthony Luzzatto Gardner, uno de los negociadores americanos ante la UE.

Desde la asociación Amigos de la Tierra, afirman que se producirán grandes rebajas en servicios públicos, como el sanitario, y que también habrá consecuencias negativas en materia de derechos laborales y en materia medioambiental.

Según esta asociación, se eliminará el principio de precaución de la Unión Europea, que impide la distribución de un producto, sustancia o tecnología cuyos efectos para la salud o el medioambiente generen dudas. Por ejemplo, advierten sobre el uso de 150 transgénicos que se utilizan en Estados Unidos y que podrían comenzar a utilizarse en la UE. La próxima ronda de negociaciones tendrá lugar en diciembre y tanto los defensores como los detractores tendrán mucho que decir.

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