- Hasta hace unos días era edil del municipio sevillano de Castilleja de la Cuesta
Carmen López, la concejala de Ciudadanos que ha sido expulsada por el partido por pedir un avión mensual desde Chicago para acudir a los plenos del municipio sevillano de Castilleja de la Cuesta vuelve a ser noticia. Tras la polémica que ha protagonizado por pretender que el Ayuntamiento le costease el viaje, lo que le ha costado su salida del partido, ahora ha sorprendido al asegurar que fue clave para desmontar el certamen de Miss España.
Asegura que ella misma ayudó a "desmontar" el concurso de belleza
Según se hace eco Vanitatis, la propia López ha sido la que ha desvelado la noticia. La exconcejala, que fue Miss Sevilla en 1991, ha asegurado que fue ella "la persona que contribuyó desde dentro para que el concurso de Miss España desapareciese".
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Tal y como ha desvelado, ella misma ayudó a "desmontar" el concurso, aunque eso sí "dignificando siempre el trabajo de las chicas que se presentan a los concursos de belleza" después de enterarse de lo que ocurrió el año en que ella se presentó, cuando ganó Sofía Mazagatos.
"Ahora soy política y pienso seguir luchando", ha dicho Carmen López al mencionado medio, que recuerda que su vida está repleta de nombres de personajes conocidos y de supuestas tramas de corrupción tanto en su actual etapa como política como en su pasado en certámenes de belleza.
¿QUÉ PASÓ?
López ha explicado que en el verano de 1991 se presentó a la preselección para ser Miss Sevilla y que fue ahí cuando se dio cuenta de que el concurso estaba amañado, porque a ella la aclamaba el público y no ganó. Sin embargo, fue llamada para acudir al concurso y elegir a la joven que representaría a la provincia en el certamen nacional, y ahí, dice, se dio cuenta de lo que sucedía.
"Era un escándalo, porque había una chica que ensayaba una y otra vez cómo ponerse la corona y coger el ramo. Pero la organización cometió el error de traer un jurado de famosos para el concurso y televisarlo en directo". Según cuenta, pese a que "la organización les aconsejó que votaran a otra candidata, ellos, que ya tenían su caché por sí mismos y no necesitaban entrar en chanchullos, me votaron a mí. Hasta Raquel Revuelta lo hizo, aunque años después, cuando denuncié a la organización, no estuvo de mi lado", asegura la exconcejala.
"Era un escándalo, porque había una chica que ensayaba una y otra vez cómo ponerse la corona y coger el ramo"
Y asegura que ahí empezó el boicot contra ella. "Yo gané el concurso, pero ellos querían a otra. Me abandonaron un poco de cara al certamen de Miss España", recuerda la exedil, que señala que sus vestidos "aparecieron rotos" tras los ensayos y dice que no fueron sus compañeras. La que fuese concejala relata cómo pasó todo el concurso "con un esguince sin tratar y subida a tacones", y cómo trataron de descalificarla en más de una ocasión.
Y remarca que la gota que colmó el vaso fue la pregunta que le hizo Inocencio Arias, que formaba parte del jurado. Le preguntó si se iba a drogar cuando acabase el concurso como lo hizo Amparo Muñoz, algo que ella se negó a contestar. Su padre amenazó con impugnar el concurso y pese a que las chicas la eligieron Miss Simpatía le retiraron el premio "bajo la acusación falsa de haber pegado a la miss que finalmente obtuvo el título (Melilla) y a la cual me obligaron a poner la banda". El título lo ganó Sofía Mazagatos, "que gozaba del favor de Luis María Anson".
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LA DENUNCIA
Siguió con sus 'pinitos' en el mundo de la publicidad y la televisión y por eso no se decidió a denunciar lo ocurrido en los medios de comunicación hasta 2001. "Nunca cejé en mi empeño de esclarecer la verdad y en 2001, en el programa 'Corazón, Corazón' me grabaron una larga entrevista. En ella lo cuento todo, pero no es lo que se emite. Sin embargo, esa cinta llega a manos de El Mundo TV y con mi colaboración deciden montar la historia de la redactora infiltrada en Miss España. Ella era la niña que ponía la cara, pero la investigación fue realizada entre otras personas gracias a mí".
Y concluye asegurando que "los que se ríen de mí ahora por la anécdota de los billetes de avión no conocen mi pasado ni mi bagaje profesional".
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