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La industria española de fondos tiene ya más de 240.000 millones de activos bajo gestión, rozando los niveles anteriores a la crisis, según los datos de la asociación de gestoras Inverco. Dentro de estas cifras, el 12% está en renta variable, donde el estilo más exitoso durante las últimas tres décadas ha sido el 'value', que consiste en comprar acciones infravaloradas por el mercado para aprovechar su potencial de revalorización.

Los rankings de fondos de bolsa española están dominados, prácticamente en cualquier horizonte temporal, por la filosofía de inversión que propulsó Benjamin Graham (1894-1976) tras el ‘crash’ de 1929. Graham, autor de los libros ‘El inversor inteligente’ y ‘Security Analysis’, basó su estrategia en comprar acciones baratas respecto a la valoración que consideraba que por fundamentales tenían las empresas. La diferencia entre ambos números es lo que definió como margen de seguridad.

Sin embargo, fue su discípulo más aventajado, Warren Buffett (1930, Omaha -Nebraska, EEUU-), el que popularizó este estilo de inversión. El máximo accionista de Bekshire Hathaway, apodado como el ‘Oráculo de Omaha’, es uno de los inversores más exitosos de todos los tiempos con rentabilidades que sistemáticamente han sido superiores a las del S&P 500, algo de lo que muy pocos pueden presumir. Gracias a ello, ha amasado una fortuna que supera los 73.000 millones de dólares, según Bloomberg. El secreto de Buffett ha sido seguir la filosofía de Graham añadiendo requisitos para sus compras sobre la calidad de la empresa, la posición competitiva en el sector en el que opera y la forma de trabajar de sus directivos.

Gran parte de los gestores de inversiones que, junto a Buffett, pueden presumir también de batir a sus índices son los que tienen el ‘value’ como su ‘receta mágica’, como Peter Lynch (ex de Fidelity) o Charles Munger (socio de Buffett en Berkshire). Otro nombre propio destacado es el de Pat Dorsey, que fue director de investigación de renta variable en la firma de análisis Morningstar entre 1998 y 2011. En ese periodo trabajó en el concepto de ventajas competitivas, un aspecto clave para el éxito de los inversores ‘value’.

Francisco García Paramés, desde su cargo de director de inversiones de Bestinver durante tres décadas hasta hace dos años, ha sido el máximo exponente del ‘value’. En su libro ‘Invirtiendo a largo plazo’, explica que su metodología de trabajo se basa en la reversión a la media. Un concepto estadístico aplicado en este caso al hecho de que considera que el mercado es eficiente en el largo plazo. Pero a corto plazo hay acciones que están caras o baratas teniendo en cuenta sus fundamentales, que tienden a moverse hacia su valoración objetiva. Al comprar las baratas, se consigue el beneficio.

En 2017 Paramés ha regresado al mundo de la gestión con Cobas Asset Management, lo que añade más competencia y visibilidad a este estilo de inversión, que ahora cuenta con más jugadores, entre los que destacan Bestinver, con Beltrán de la Lastra a la cabeza; azValor, firma dirigida por Álvaro Guzmán de Lázaro, Fernando Bernad y Beltrán Parages; o Magallanes, con Iván Martín como su gestor estrella y director de inversiones.

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