Prácticamente, una docena de compañías invertidas por Paramés en sus fondos internacional e ibérico se han visto arrolladas por el coronavirus, especialmente en la primera de las dos carteras. Sin embargo, el responsable de Cobas tranquiliza a sus clientes. En una carta remitida ayer a última hora, indica que “probablemente, no haya ningún impacto relevante a largo plazo” y también que estas acciones, sumados sus pesos, tienen un impacto relativo pequeño sobre el total de la estrategia.
Por un lado, destaca a las compañías de exploración y producción de petróleo y gas. En la cartera internacional, Cairn, IPCO y Kosmos Energy suman un peso del 3,5%. Para elaborar un plan de daños, Paramés asume que la bajada del precio del crudo es permanente y estima un precio a largo plazo del Brent de 40 dólares (frente a los 60 dólares que utilizaba antes). Así, las valoraciones de estas tres compañías caerían “significativamente” y el valor objetivo del Cobas Internacional bajaría de 183,7 a 179 euros. “Un impacto relativamente marginal”, en opinión del gurú español del ‘value investing’. En la cartera ibérica, la afectada es Repsol, pero representa un 1% y el impacto en valoración en la compañía y en la cartera sería “escaso, por la compensación en el resto de actividades”.
Un segundo bloque son las compañías de servicios derivados del petróleo: Petrofac, Subsea 7, Saipem y Valaris, que representan un 6% de la cartera internacional, y Técnicas Reunidas, con un 10% de la cartera nacional. Como explica Cobas en su carta urgente a inversores, “puede haber impacto permanente en algunas actividades de estas compañías, pero en general están muy diversificadas: exploración de gas, exploración de petróleo, refino, transporte, petroquímica, etc, lo que mitiga sustancialmente el impacto a largo plazo”.
Lo cierto es que, a primera vista, los fondos de Paramés podrían parecer severamente afectados por el coronavirus, ya que, particularmente, su cartera internacional tiene un 15% de exposición agregada a cotizadas de Italia o un 10% en Corea. Pero, hay matices. “Evidentemente, algunas de ellas se ven afectadas por la situación, aunque en las italianas solo un tercio de sus ventas son en Italia”, confía el gestor.
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CIR, líder italiano en residencias para la tercera edad, ha tenido únicamente un enfermo en sus residencias hasta el momento. OVS, cadena líder de ropa en Italia, está soportando una caída de las ventas durante las últimas tres semanas. Por su parte, Meliá y las inmobiliarias españolas pueden ver como sus hoteles están bajos de ocupación o sus ventas se ralentizan, “pero pensamos que el efecto será temporal y asumible por las compañías”.
CONTRAPESO
Pero no todo son malas noticias en los fondos de Paramés. Sus inversiones tienen algunos puntos fuertes que hacen de contrapeso a las caídas derivadas de la pandemia. “La mayoría de nuestras compañías tiene caja neta o deuda limitada, que les permite soportar sin problemas estos problemas temporales y tienen un carácter defensivo por la naturaleza de sus negocios”, argumenta Cobas. Igualmente, como en toda crisis, mientras unas empresas se lamen las heridas, otras se frotan las manos. Es el caso de las compañías de transporte de petróleo y derivados, que suponen un 7% del fondo internacional: “Los precios bajos del petróleo están provocando un incremento de la demanda que, a su vez, está haciendo aumentar los fletes, viendo mejorar sustancialmente sus resultados”.
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Hasta ayer, el Cobas Internacional caía casi un 20% en el año, el Cobas Iberia retrocedía cerca de un 15% y el Cobas Selección, que es la mezcla de sus dos estrategias, se dejaba aproximadamente un 19,5%, según Morningstar.
La carta de Paramés llega con retraso respecto a uno de sus principales competidores. Bestinver ya ha mandado dos comunicaciones extraordinarias a sus inversores a causa del virus: en la primera, reconocía que se había dejado en solo dos días un 5,5% y que tenía tres valores afectados, y en la segunda, también de ayer, explicaba que empezaba a ver oportunidades de compra y, de hecho, las caídas del mercado le han permitido poner un pie en bancos y energéticas como BNP Paribas o Rio Tinto. Por su parte, Azvalor celebró el lunes su quinta conferencia anual de inversores y lanzó un mensaje de calma: teniendo en cuenta las grandes enfermedades anteriores y su efecto en bolsa, los parqués subieron en los seis meses posteriores un 8,5% en promedio. Un rayo de esperanza en mitad de tantas noticias apocalípticas para los inversores.
TELETRABAJO
Como están haciendo otras grandes empresas en España, Cobas también contempla el teletrabajo para sus empleados como consecuencia de las últimas medidas adoptadas por la Comunidad de Madrid. En la carta, avanza que “en caso de ser necesario, en Cobas Asset Management estamos preparados para implementar un plan de contingencia que garantizará el 100% de los servicios y procedimientos de la gestora, aunque esto implique que los empleados tengan que desarrollar su actividad laboral mediante teletrabajo. De esta manera”, subraya Paramés, “garantizamos que, si es necesario aplicar el plan de contingencia, no supondrá ningún inconveniente para la habitual actividad de la gestora ni para la relación con nuestros inversores”.
