Bolsamania

Zanardi: De la tragedia automovilística a la gloria olímpica

Esta es una historia de superación en la que se dan la mano la tragedia y la mala suerte con lo mejor del ser humano. Su protagonista, el piloto italiano Alessandro Zanardi, cuyo mundo se vino abajo el 15 de septiembre de 2001 en el circuito alemán de Lausitz, hace ahora exactamente 15 años.

A principios de los 90, Zanardi era uno de los pilotos que luchaban por abrirse camino en el complicado mundillo de la Formula 1. Tuvo la ocasión de debutar en el Gran Circo de la mano de Jordan en 1991, para después correr para Minardi y Lotus. Pero tras cuatro años pilotando codo a codo con los mejores, se veía obligado a buscar fortuna en otras categorías, encontrando su sitio al fin en el CART (Champ Car World Series), lo más parecido que existía entonces a la F1. Allí es donde el destino le reservaba un durísimo golpe.

El día que Zanardi perdió sus piernas

Aquel día se disputaba en el EuroSpeedway de Lausitz una carrera llamada «The American Memorial».  Zanardi, que lideraba la prueba, salió de boxes con demasiado ímpetu y acelerando en exceso. Otro piloto, el también italiano Alex Tagliani, no pudo evitar chocar contra él.

La colisión fue brutal. Zanardi pudo ser rescatado con vida, aunque a costa de la amputación de sus dos piernas y tras perder mucha sangre. Que saliera vivo de aquel espantoso accidente es casi un milagro (el propio capellán del circuito le había dado ya la extremaunción) y probablemente quien salvó la vida al piloto fue su entrenador Steve Olvey, que tapó con sus propias manos la hemorragia en su arteria femoral.

Después de aquello, Zanardi tuvo que afrontar un largo calvario: más de 15 operaciones y una lenta y penosa rehabilitación. Pero el italiano demostró ser un tipo duro con voluntad de hierro.

Regreso al escenario de la tragedia

Ante el asombro de todos y con la oposición de parte de su familia, Alessandro Zanardi decidió volver a los circuitos. Para ello, se hizo con un vehículo adaptado, un BMW Serie 3 con los frenos y cambio de marchas integrados en el volante con el que disputaría el Campeonato Europeo de Turismos en 2003.

No sólo consiguió volver a pilotar, sino que fue capaz de anotarse algunos triunfos notables. Por fin , hace solo un par de años, Zanardi se enfrentaba a sus demonios y volvía a correr en el circuito de Lausitz, donde su vida cambió de forma dramática. Era la demostración del triunfo de la voluntad.

Campeón paralímpico

Y sin embargo, el valiente italiano aún nos reservaba una sorpresa. De forma paralela a su carrera en el mundo del motor, Zanardi empezó a practicar el ciclismo de mano, primero como afición y luego ya totalmente en serio.

Así, en Londres 2012 representó a Italia en los Juegos Paralímpicos, conquistando dos medallas de oro. Recientemente, en Río de Janeiro 2016, volvió a repetir la hazaña y se llevó otro oro a casa. Conociendo su historia, lo único que podemos hacer nosotros, como aficionados y como seres humanos, es admirar su ejemplo y quitarnos el sombrero ante este gran deportista.

Fotos vía: La Stampa