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La función start/stop está presente en 1 de cada 4 coches que se venden en España


La función start/stop hace unos años apenas se veía en los coches de gama más alta, pero está claro que esta función se ha ido generalizando e implementando en cada vez más vehículos. El propósito principal del start/stop es el ahorro de combustible apagando el motor de manera automática en paradas largas como semáforos o atascos, volviendo a encenderse de manera automática en cuanto queramos poner el coche en marcha.

En la mayoría de vehículos ésta es una opción que se puede configurar manualmente si queremos tenerla activada o no, ya que los más escépticos no terminan de tener claro que la función ahorre gasolina o pueda acortar la vida de la batería o el motor. Hay que tener en cuenta, por cierto, que en determinados casos (como cuando tenemos activada la calefacción) el motor no se desactiva para evitar posibles problemas con la batería.

De hecho, conviene echar un vistazo a un estudio realizado por AutoBild con tres modelos de vehículos distintos, realizando un recorrido muy similar con ellos, para probar la eficiencia de la función start/stop y con el que se concluye un ahorro a los 5 años de 700 euros aproximadamente (depende de muchos factores como el precio de la gasolina, modelo del vehículo para tener en cuenta su consumo…).

Los estudios reflejan que esta función garantiza un ahorro de entre el 4% y el 5% en un consumo mixto de la gasolina, porcentaje que se aumenta a la franja del 8% – 15% en el ámbito puramente urbano. Asimismo, según un estudio realizado por ANFAC Research, el 23,5% de los vehículos que se venden actualmente en España incluyen esta función siendo el porcentaje mayor de vehículos con motor diésel.

Otro aspecot a tener en cuenta es el tema de la inyección directa; aproximadamente el 19% de los vehículos vendidos en España incorporan esta opción aunque se espera que para el año 2015 este porcentaje aumente hasta el 28%. Precisamente, de los vehículos incluidos en el famoso Plan PIVE, el 21,6% de los vehículos tiene este sistema de inyección directa que permite reducir el consumo de combustible hasta en un 15%, incrementando el par del motor en un 5%. Eso sí, el dato de es escalofriante: de todos los vehículos de España, sólo el 2% tiene este sistema.

Fuente: Terra Motor