Bolsamania

El asesor de Red Bull: «Alonso lloriquea mucho»

Aunque los dos protagonistas han intentado mantener las formas de cara a la definitiva carrera de esta tarde, lo cierto es que la polémica está servida. En Ferrari nadie ha alzado la voz por el momento, pero sí lo han hecho desde Red Bull. El asesor de la escudería austriaca, Helmut Marko, ha decidido convertirse en protagonista horas antes del Gran Premio de Brasil, al criticar con dureza a Fernando Alonso. “Quizá no ha tenido el coche más rápido, pero de todos modos ha sido muy bueno durante toda la temporada. Si Alonso dice que está luchando con armas sin filo, entonces está lloriqueando mucho”, declaró sin tapujos.

Echando la vista para atrás, la actitud de Marko no es sorprendente. Hace no tanto tiempo, abroncó de forma desproporcionada a Jaime Alguersuari por no dejarse adelantar a la primera por el primer piloto de Red Bull en unos entrenamientos libres de Corea. Él se considera a sí misma una suerte de dios del motor y a los integrantes de su equipo, seres divinos que han bajado desde el cielo. Las formas de Fernando Alonso pueden gustar más o menos, pero todos dentro de la Fórmula 1 saben que encierran una gran verdad: el Ferrari no es, ni de lejos, el mejor coche de la parrilla.

Empero, el asesor de Red Bull continúa obstinado en su discurso, alegando argumentos que carecen de coherencia: “¿Quién tuvo el mejor coche en Hockenheim? El Ferrari no es tan malo como dicen«. Da la impresión de que quiere conseguir dar valor a la hipotética victoria de Vettel en el Campeonato. No es ningún secreto que muchas de las voces autorizadas del paddock consideran a Fernando Alonso el vencedor moral, suceda lo que suceda en Interlagos. El asturiano ha plantado batalla hasta el final con un monoplaza limitado y eso es meritorio.

También es posible -aunque muy difícil- que se produzca el milagro en el circuito brasileño. En ese caso, podríamos llegar a la conclusión de que Marko está tratando de poner la venda antes de que se abra la herida. Todos sabemos que, ahora mismo, Vettel tiene mucho que perder y muy poco ganar. Con las condiciones de su coche, al germano se le exige ganar. Esperando agazapado se encuentra Fernando Alonso, consciente de que posiblemente tenga una mínima oportunidad de conseguir una gesta mayúscula, que sin duda sería recordada durante mucho, mucho tiempo. Mal que le pese al asesor de Red Bull.