Bolsamania

Audi R8, segundo round

Audi R8

El Audi R8 está muerto, ¡viva el Audi R8! En apariencia muy parecido a su antecesor, la berlina de Ingolstadt presenta todavía el V8 y ofrece un nuevo aspecto desde el punto de visto de la tecnología.

Hemos vistos actualizaciones en cuanto al estilo de las más espectaculares, incluso en Audi. Sin embargo, se trata de un R8 el que se convertirá en estrella en el salón de Ginebra dentro de pocos días. Vista la pureza de su diseño original, este conservadurismo está lejos de ser un drama, pero tras la sutil evolución del TT para su tercer opus, podríamos habernos esperado a un paso del testigo más espectacular, entre el primer R8, que entronizó a Audi en 2007 en el muy cerrado círculo de los fabricantes de supercars, a su reemplazante.

El habitáculo evoluciona de manera sensible, con grandes líneas similares, pero una consola central reducida a su más simple expresión, y sobretodo con la llegada del Virtual Cockpit estrenado por el TT, que hace del combinado de instrumentación, una pantalla de 12,3 pulgadas.

Debajo de este envoltorio de apariencia muy similar, se disimula un coche revisado a fondo, y aligerado en un centenar de kg (es decir 1 550 kg). La estructura da prioridad al aluminio, pero también al CFRP (carbon fiber reinforced plastic), un composite ultraligero ya utilizado por el BMW i8, o bien en el Lamborghini Huracan con el que el R8 comparte plataforma y el V10 5.2 atmosférico.

Este último estará disponible en una versión estándar de 540 cv (540 Nm) y una versión “Plus” de 610 cv (560 Nm), una potencia idéntica a la del Lamborghini, cuando Audi mantenía cierta distancia respetuosa. El conjunto se transmite a las cuatro ruedas vía el Quattro, que está en medida de distribuir 100% de la potencia en la parte delantera o en la trasera, en función de las condiciones de adherencia. Triste noticia, el V8 y la caja manual han desaparecido.

Foto – Thecarconnection