Los precios no dan tregua en Estados Unidos. El dato de diciembre, que conocimos el pasado miércoles, marcó máximos desde 1982. Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal (Fed), considera que la inflación es uno de los problemas que puede amenazar las perspectivas económicas. "Tendremos que subir más los intereses si la inflación persiste", llegó a decir ante el Comité Bancario del Senado el martes. Ante esta situación, la gestora de fondos Federated Hermes ha puesto el foco en cómo están recibiendo estas noticias los mercados.
"Estamos firmemente comprometidos con el logro de nuestros objetivos estatutarios de máximo empleo y estabilidad de precios. Usaremos nuestras herramientas para apoyar la economía y un mercado laboral fuerte y para evitar que arraigue una mayor inflación", dijo el banquero central ante los representantes legislativos de EEUU.
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Tras la publicación de las actas del último Comité de Mercado Abierto de la Fed (FOMC, por sus siglas en inglés), el giro 'hawkish' del organismo monetario americano se ha confirmado. Varios funcionarios creen que el momento de subir los tipos y liquidar el balance puede llegar durante este 2022 y que puede comenzar este mismo mes de marzo.
Y es que la inflación ha vuelto a marcar máximos. Esta vez, desde 1982 al subir un 7% en tasa interanual. Los precios de producción también han marcado récord de toda la serie histórica, desde 2010.
Estos datos recibieron "una reacción moderada pero positiva de los inversores, con los mercados de renta variable ganando y los rendimientos del Tesoro retrocediendo", tal y como indica Geir Lode, director de renta variable global del negocio internacional de Federated Hermes. "Los mercados en 2022 se están mostrando volátiles a medida que la realidad de la inflación se asienta, y esta reacción refleja principalmente el alivio de que el dato no haya superado las ya elevadas expectativas", añade.
En este contexto, según comenta el analista, el mercado sigue girando hacia un "mercado de valor" o "mercado de anticrecimiento" con una conclusión: los nombres de alto múltiplo y alto crecimiento parecen vulnerables.
"Durante la próxima temporada de resultados, prevemos que los inversores mostrarán una tolerancia nula a los fallos en los resultados y, en particular, a las rebajas de las previsiones", comenta. Ve poco probable que esta transición de un mercado de crecimiento a uno de valor sea "suave". "Habrá días en los que el rendimiento superior del valor se detenga, o incluso cuando veamos fuertes retrocesos a medida que la tecnología y los valores 'growth' similares reboten con fuerza, pero en conjunto prevemos que los flujos favorezcan el extremo más barato del mercado", argumenta.
"Ha habido muchos falsos amaneceres para los inversores 'value' durante la última década, pero el argumento a favor del 'value' nunca ha sido tan fuerte como ahora", sentencia.
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"Mientras tanto, China parece seguir una senda cada vez más divergente en comparación con EEUU, tanto en lo que respecta a los datos económicos como al impulso de la política económica", opina Silvia Dall'Angelo, economista senior del negocio internacional de Federated Hermes.
En el caso de la potencia asiática, los precios subieron un 1,5% en tasa interanual, menos de lo esperado, mientras que los precios de producción se dispararon al 10,3%.
"De cara al futuro, es probable que la inflación del IPP se modere notablemente a lo largo del año, desde el territorio de dos dígitos actual, mientras que la inflación del IPC podría endurecerse un poco, aunque permaneciendo bien contenida", comenta esta experta.
Cree que el Banco Popular de China tiene margen para relajar la política monetaria, lo que "debería ayudar a estabilizar el crecimiento, mientras el país se enfrenta a retos a largo plazo -sobre todo la corrección del sector inmobiliario- y a algunos plazos políticos a corto plazo".
