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Maserati Levante: SUV tardío

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Ha tardado, ha tardado mucho tiempo. Pero ahora por fin, Maserati presentará en el Salón de Ginebra un SUV sobre el cuál pesan muchas esperanzas. Se llama Levante.

Como muchos fabricantes de deportivos, los italianos del norte también miran desde hace muchos años en dirección a Stuttgart. En Maserati no cambiará tanto la estrategia de marca porque el actual portfolio no lo dominan deportivos, sino berlinas de motorización potente en forma de Ghibli y Quattroporte. No obstante, en un futuro el Levante será un coche que se llevará parte del pastel y pondrá en aprieto los Gran Turismo y los Grand Cabrio.

El diseño del Maserati Levante con su capó alargado y una cabina posicionada hacia la zaga, recuerda al Infiniti FX. Sin embargo, los parecidos a los actuales Ghibli y Quattroporte no son fruto de la casualidad.

El Levante cuenta con un frontal muy marcado con una potente parrilla de ocho láminas. Como en las generaciones más jóvenes BMW, los grupos ópticos se han acercado a la parrilla delantera. Los faros de niebla, completamente redondos. Algo que ya tuvo buena aceptación en el BMW X5.

Todas las versiones del Levante cuentan con tracción a las cuatro ruedas, suspensión regulable neumática, diferentes programas de conducción y una transmisión de ocho marchas automática. La mayoría de los clientes europeos se intersearán probablemnte por las versiones diesel, motores que el Levante se presta del Ghibli.

Aquí habrá probablemente varias escalas de potencia desde los 250 hasta los 350 caballos. El que quiera más, encontrará en el sobrealimentados V6 gasolina actual del Ghibli, 330 y 410 caballos. Es de suponer y debido a la alta competencia de BMW X3/X5, Porsche Macan/Cayenne, Audi Q5 o Jaguar F-Pace que en un tiempo más tardío salga a la venta una versión deportiva de mucha potencia con hasta 500 caballos.