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Hyundai i10. El más grande en la gama de los pequeños.

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El Hyundai i10 ha crecido considerablemente comparado con su antecesor. También en temas confort ha avanzado considerablemnte. El coche recién renovado en el pasado otoño ofrece por apenas 3.000 euros supletorios un analgama de opciones. En su versión más básica el precio esta un poco por debajo de los 10.000 euros.

La gente de Corea ha hecho un buen trabajo en temas diseño. El Hyundai i10 aparente ser más grande de lo que en realidad es con sus 3,67 metros. Comparado con su antecesor ha crecido en ocho centímetros y junto a una mayor batalla en el interior se consigue un espacio generoso. Con unas líneas sintónicas cuenta con una entrada de aire extragrande en el frontal con lo que adquiere aspecto de atleta. No obstante no pierde su ternura.

El interior gana con plásticos amplios y un panel de control colorado que en combinación con el color de los asientos es parte de un estudiado contraste de colores interiores. Los asientos tienen un buena zona de reposamuslos y ofrecen un buen confort. El habitáculo cuenta con un reparto ordenado de instrumentos y paneles los cuáles son claros y de fácil lectura. Todas las funciones primarias estan colocadas en la parte alta, son fáciles e intuitivas. Más abajo se encuentran suficientes posibilidades de almacenaje y colocación de objetos.

Si se opta por la opción de completo equipamiento el Hyundai i10 cuenta incluso con volante en cuero con temperatura o asientos calefactables. Cosas que hasta ahora solo se encontraba en coche como el Opel Adam o las berlinas de gama superior.

La cabida de pasajeros puede convencer. En la parte delantera con sus 1,66 metros de ancho los pasajeros tendrán una suficiente cabida. Es quizás atrás que si bien la puerta de entrada es grande y no presenta obstáculo donde surgen los problemas para personas muy altas. Éste coche cuenta por temas de resistencia al aire con tres centímetros menos que el Hyundai anterior. El contacto de piernas con la parte posterior de los asientos delanteros no se deja evitar.

El i10 cuenta con 252 litros de capacidad de maletero. Un lujo dentro de esta gama, es de los que más espacio tienen. Si se abaten los asientos traseros el volumen se eleva hasta los 1.046 litros. El Hyundai i10 cuenta además con más cajones y espacios para carga debajo del suelo del maletero. Multitud de redes ayudan a mantener el equipaje en su lugar.

El motor de éste 1,2 litros gasolina es muy fuerte. Cuenta con uns rendimientos interesantes tardando 12,3 segundos para acelerar sus 1.104 kilogramos hasta los cien por hora. El cambio de cinco marchas no es un ejemplo de precisión y quizás estaría bien cambios más cortos, pero todo esto es aceptable para un coche de éste tipo de gama.

El consumo no obstante quizás podría ser mejor. Por un lado la única variante del i10 que cuenta con función start stop es la Blue-version, pensada exprofesamente para el consumo optimizado, todo el resto de los mortales se las tendrá que arreglar a su manera. El fabricante indica un consumo de 4,8 litros a los cien, cifra que con un poco de esfuerzo se puede alcanzar pero la realidad en momentos de conducción más agresiva es un consumo de 6,9 litros. En términos medios serán los 6,1 litros la cifra más habitual. Con sus 40 litros de capacidad de depósito de combustible el Hyundai i10 tiene una autonomías más que considerable.

En definitiva un coche que quizás no cuente con la opción de navegación y tampoco cuenta con el último grito de asistentes de conducción como freno de emergencia de ciudad pero para ello tiene multitud de otros pequeños opcionales así como una buena amortiguación y un precio un cuatro por ciento más barato que su antecesor.

Pero la realidad también es que en ésta gama de vehículos pequeños, el usuario busca primero la forma y acto seguido el precio. Y esto es un cosa que en ambos criterios el Hyundai i10 convence con argumentos de primera categoría.