Bolsamania

Lanchester 21, el enemigo del Rolls-Royce


Lanchester no es un fabricante de automóviles muy conocido. Sin embargo, esta marca británica que puso punto final a su historia en el año 1955 fue la máxima representación de la elegancia y la exclusividad british en el periodo de entreguerras.

Su modelo Lanchester 21 (producido entre 1923 y 1926) y su heredero el Lanchester 23 (1926-1931) fueron de hecho la gran alternativa a los Rolls-Royce, casi podríamos decir, el enemigo más temible con el que se tuvo que enfrentar la gran marca de lujo por antonomasia.

No es ningún secreto: el Lanchester 21 fue concebido y diseñado en el año 1923 para robarle la clientela a Rolls-Royce, una clientela formada principalmente por miembros de la nobleza y la burguesía británica de la época.

Se trata en todo caso de uno de los mejores coches construidos en esa década, con acabados excepcionales, un alto nivel de comodidad (consiguió atenuar el ruido del motor mucho mejor que sus competidores) y con frenos de alto rendimiento para su época. No se pueden contar ni clasificar las variantes de la carrocería puesto que quienes compraban estos coches solían personalizarlos a su gusto en un taller de confianza.

El motor de la Lanchester 21 era un 3.1 de seis cilindros y 21 CV de potencia. Fue en 1926, con la introducción de un motor3.3 de seis cilindros y 23 CV, más potente y flexible , cuando vería la luz su sucesor, el Lanchester 23.

Los coleccionistas saben que resulta prácticamente imposible encontrar un Lanchester 21 fuera del Reino Unido, y que hacerse con uno en buenas condiciones supone desembolsar al menos 60.000€. Es el precio a pagar para tener un pedazo de historia en tu garaje.

Fotos – Wikipedia