Bolsamania

Grecia, un gigantesco desguace de coches abandonados

A cameraman films confiscated cars in a yard of ODDY in Athens

En ningún país de la Unión Europea son tan visibles y crudas las consecuencias de la crisis económica. Los griegos vivieron también su propia burbuja automovilística, cuando hace solo 6 años compraban más coches per cápita que el resto de sus vecinos europeos. Ahora muchos de estos vehículos están abandonados en calles, carreteras  y aparcamientos, convirtiendo a Grecia en un inmenso desguace.

Por todo el país hay extensos cementerios de vehículos, muchos de ellos relativamente nuevos, abandonados a su suerte porque no sus propietarios no pueden mantenerlos. Muchos ciudadanos de este país ni siquiera pueden pagar la gasolina.

Los primeros en caer fueron los coches de alta gama: hace dos años que Ferrari no ha vendido ni una sola unidad en Grecia. Msá tarde, cuando el gobierno griego anunció su intención de cargar con más impuestos a los propietarios de vehículos, se produjo la gran avalancha de bajas de matriculación.

800.000 coches circulando sin seguro

greece_wide-ba7b90874e0741518a1951c70d27328b2bb574fb-s6-c30Es habitual encontrar en las zonas residenciales de Atenas coches aparcados cubiertos por fundas de plástico y sin placas de matrículas a la espera de que algún día la economía se recupere y sus dueños puedan «resucitarlos de entre los muertos». Pero las previsiones a corto y medio plazo no son precisamente halagüeñas.

A lo que ha llevado esta situación es a que en el país ahora mismo estén circulando miles de vehículos sin matrículas, o con matrículas falsas, por pura necesidad: mucha gente necesita el coche para trabajar pero no puede permitírselo. por otra parte, se calcula que en Grecia hay alrededor de 800.000 coches circulando sin seguro.

El único negocio vinculado al mundo del motor que parece funcionar ahora en Grecia es el siguiente: los concesionarios compran coches usados, muchos de ellos en muy buen estado, a sus desesperados propietarios a precios de ganga. Luego los exportan como vehículos usados a otros países de la UE y obtienen grandes beneficios. Y es que el hambre agudiza el ingenio.

Fotos – Greek Reporter