Bolsamania

Flaminio Bertoni, creador del Citroën 2 CV

 

Flaminio Bertoni, diseñador de coches, está en el origen de un modelo revolucionario: el Citroën 2 CV. Flaminio Bertoni (1903-1964), joven aprendiz en un taller de Masnago, cerca de Como, sucumbe rápido a su pasión devoradora por los coches, lo que le lleva a adentrarse en busca de nuevos horizontes.

Desde 1922, los responsables del taller local, Macchi, perciben el potencial del joven en que Bertoni se ha convertido. Así que lo transfieren a otro departamento, más adaptado a sus cualidades. En 1923, un grupo de técnicos franceses que están de visita, impresionados por sus dones, le ofrecen ir a pasar un tiempo de estudios en Francia.

De vuelta en Italia, en 1924, decide abrir su propio taller, en Varese. Deja el taller Macchi en 1929, y se concentra en sus diseños y proyectos personales. Los primeros en interesarse por su trabajo son fábricas de la región, La Varesina, y la Malnata. En esa época, participa en tres exposiciones, concretamente en 1930, una en Varese, otra en Milán y otra en Roma.

De la tracción delantera al futuro 2 CV

Flaminio Bertoni es el hombre de la tracción delantera, cuyo modelo reducido confeccionado con pasta para modelar lo crea en una sola noche, en 1934. Es la primera vez que un proyecto de coche se realiza en otro soporte que no sea papel.

En la exposición de Bellas Artes de Asnieres, gana el tercer premio de escultura. El éxito se vuelve a repetir durante la V edición de esta misma exposición, y durante la exposición de la ciudad de Versalles, en 1935. Entonces comienza a ejercer su talento en Citroën, sobre un tema que le interesa mucho a Pierre-Jules Boulanger (1885-1950), presidente de la compañía: la creación de un coche asequible, espacioso, resistente. Estamos hablando del futuro 2 CV.

Se trata pues de fabricar un coche capaz de transportar entre 5 y 6 personas, 50 kg de maletas, y a una velocidad de 50 km/h, en cualquier tipo de terreno, y con un mínimo de mantenimiento.

En 1991, la producción del 2 CV se detiene. Argentina es el último país en fabricarlo. Su éxito es incontestable durante cuarenta y dos años: 3 millones de unidades vendidas, y en múltiples versiones.

Foto – Tectonicablog