Bolsamania

El ABS – sistema de antibloqueo –

Las primeras pruebas ya se realizaron en los años 20 relativas a un sistema antibloqueo durante la frenada. Se trataba de evitar el bloqueo de las ruedas tanto en trenes, aviones y vehículos durante la frenada. Patentado en el año 1936 por la compañía alemana Bosch, no fue hasta los años 70 cuando se implementaría de serie una primera generación del sistema ABS. La primera patente de Bosch abarcaba una «preinstalación para evitar la frenada fija de las ruedas en un vehículo». Se componía de casi 1000 piezas y era poco manejable y lento. Con la técnica digital se pudo reducir la cantidad de piezas a 140 por lo que el ABS ya se podía fabricar en serie.

En 1978 Bosch sacó al mercado y patentó, protegiendo jurídicamente, el término «ABS» (del alemán Antiblockiersystem). Otros fabricantes denominan parcialmente su sistema ABV (Automatischer Blockverhinderer). Se instaló inicialmente en los Mercedes clase S así como en los BMW serie 7. Pero no fue hasta 1985, año en el que se comenzó la instalación en serie primero en los Ford Scorpio seguido de Volkswagen Golf II, Passat III y en el Transporter T3.

El sistema funciona en consonancia con el sistema de frenado tradicional incorporando una bomba en los circuitos de los líquidos de frenos junto a unos detectores de revoluciones de las ruedas. En consecuencia cuando durante una frenada alguna de las ruedas reduce las revoluciones más que las otras, el sistema lo detecta e interpreta que hay posibilidad de bloqueo de la rueda. Si la rueda se bloquea se deslizaría entonces por la superficie sin poder el conductor controlar la misma. Para evitar esta situación, la centralita del sistema ABS envía la señal pertinente a la bomba de freno reduciendo automáticamente la presión. En los vehículos modernos actuales la frenada es optimizada a través del ABS individualmente para cada rueda.

Las ventajas de este sistema son sobre todo en terrenos regulares:

  • Se puede mantener el control sobre el vehículo también en caso de frenada en seco, de tal manera que se pueden esquivar obstáculos.
  • Sobre todo en carreteras mojadas hay una mejor reacción y más corta trayectoria de frenado en los vehículos.
  • Economización de los neumáticos ya que el desgaste se reparte equitativamente por todo el neumático.
  • Mejor manejabilidad del vehículo en carreteras de agarre irregular.
  • La fuerza de frenado se reparte individualmente sobre cada rueda.

Como desventaja cabe destacar que sin el sistema de ABS sobre terrenos irregulares (arena, gravilla o nieve) los vehículos en el momento de bloqueo de la rueda tienden a crear una cuña en el terreno al momento de frenar lo que favorece el frenado ya que actúa como un obstáculo al giro de la rueda. Si esta cuña no se crea, la distancia de frenado se ve aumentada. En consecuencia los antiguos sistemas de ABS no favorecían la creación de la cuña lo que se traducía en distancias de frenado más largas.

Imagen: Seguridadmasss