7.000 euros en 60 km: así cuesta mantener el Bugatti Bolide
Desde finales de 2024, Bugatti comenzó a entregar las primeras unidades del Bolide, una máquina diseñada exclusivamente para circuito, con prestaciones extremas y un precio de partida que supera los cuatro millones de euros. Pero para los pocos afortunados que ya lo tienen en su garaje, el verdadero coste apenas empieza tras recibir las llaves.
Mantener un Bolide no es un capricho de millonarios: es un pozo sin fondo que ha dejado atónitos incluso a quienes ya sabían que poseer un Bugatti es sinónimo de gastos estratosféricos. Uno de los primeros propietarios ha detallado los gastos iniciales y son difíciles de creer incluso para los estándares del mundo de los hiperdeportivos.
El consumo de combustible es solo el comienzo. El Bolide equipa un W16 de 8.0 litros y 1.600 CV, capaz de devorar casi 80 litros de gasolina a los 100 kilómetros. Con los precios actuales de la gasolina de 98 octanos en España rondando los 1,78 €/litro (según datos del Geoportal de Hidrocarburos), llenar su depósito de 84 litros puede superar fácilmente los 150 euros. Eso sí, Bugatti recomienda utilizar gasolina de 110 octanos, bastante más cara y difícil de encontrar fuera de eventos o circuitos.
Pero si el combustible duele, los neumáticos son directamente un golpe al bolsillo. Las gomas slick diseñadas para el Bolide soportan apenas 60 kilómetros de uso antes de necesitar reemplazo. Cambiar el juego completo cuesta unos 7.000 euros, y no basta con instalarlos: deben ser montados y desmontados tres veces antes de su primer uso para garantizar su fiabilidad. Además, antes de rodar deben calentarse a 80 grados, un proceso que requiere equipamiento específico.
El mantenimiento anual tampoco da tregua. Independientemente de los kilómetros recorridos, hay cuatro elementos que deben sustituirse cada año: los cinturones de seguridad, el tanque de combustible, el extintor de incendios y la batería auxiliar del sistema eléctrico. Una exigencia derivada de la normativa FIA para vehículos de circuito, pero que añade otro coste considerable a la factura.
Otro detalle poco conocido: tras cada sesión de conducción intensa, Bugatti aconseja enfriar el motor utilizando ventiladores especiales durante al menos 30 minutos para proteger el turbo y otros componentes críticos. Estos ventiladores, por supuesto, son de la propia marca y forman parte del extenso catálogo de accesorios «recomendados».
Con solo 40 unidades previstas y todas ya asignadas, el Bugatti Bolide se convierte en uno de los automóviles más exclusivos y caros de mantener del planeta. Mientras tanto, la industria sigue avanzando hacia nuevas generaciones de hypercars, con el Bolide marcando un listón que solo unos pocos podrán siquiera intentar superar.
