Bolsamania

Los viejos coches clásicos de Cuba, ¿en peligro de extinción?

El tiempo se detuvo en Cuba en octubre de 1960, cuando Estados Unidos decretó el famoso embargo. El parque automovilístico de la isla es básicamente el mismo que entonces: viejos coches americanos de los años 50 mantenidos con vida casi milagrosamente, ya convertidos en clásicos.

Parte del encanto de viajar a Cuba, sobre todo para los amantes del motor, era encontrarse con estas antiguallas, viejas y remendadas, pero todavía elegantes, circulando por las calles. Curiosamente, el deshielo de las relaciones entre Cuba y sus vecinos yanquis, que tantos beneficios traerá a sus habitantes, podría suponer el final para estos coches. ¿Habrá que despedirse de esos Chrysler, Ford y Chevrolet de la época anterior a la Revolución? ¿No va a haber ni siquiera un museo para conservarlos?

Por desgracia, parece ser que sus días están contados. Muchos de esos coches antiguos están equipados con motores diésel muy contaminantes. Los mecánicos cubanos, transformados por la necesidad en expertos e imaginativos restauradores de automóviles, aborrecen la idea de sustituir estos motores por otros. Hay que tener en cuenta que hoy el litro de gasolina cuesta en Cuba 1,20 dólares, el doble que el gasoil. Y eso en un país donde el salario medio es de 25 dólares al mes, es un dato incontestable.

Pero debido a la precaria situación económica de los habitantes de la isla, la posibilidad de una renovación completa y rápida del parque automovilístico es una quimera, por grande que sea el desbloqueo político.

En cambio, sí hay una legión de coleccionistas norteamericanos y amantes de los coches clásicos que ya han puesto sus ojos en Cuba y están dispuestos a pagar lo que sea para importar estos coches. Es de esperar que, en tales circunstancias, el poseedor de uno de estos coches pueda obtener grandes beneficios.

Nada va a ser el mismo en Cuba a partir de ahora. Y eso incluye también a su maravillosa y vetusta flota de coches de los años 50.

Fotos – Canalviajes