Las ampliaciones de capital marcan mínimos históricos en julio
Nunca antes se había cerrado este mes con menos de 2.000 millones de euros
Las ampliaciones de capital llevadas a cabo por el tejido empresarial español se situaron en mínimos históricos en julio, cuando su importe alcanzó los 1.943,4 millones de euros, lo que supone un retroceso del 44,2% en términos interanuales, según los datos procesados por el Gabinete de Estudios Económicos de la agencia de rating Axesor.
En los siete primeros meses del año las ampliaciones de capital alcanzaron los 16.178,8 millones de euros, un 40,1% menos que en el mismo periodo de 2017. Así, las ampliaciones de capital ahondan en la fuerte tendencia bajista que ya se experimentó en junio. De hecho, nunca en el mes de julio se habían registrado menos de 2.000 millones de euros y, del mismo modo, tampoco el balance del periodo enero-julio se había saldado con menos de 20.000 millones de euros.
En los siete primeros meses del año las ampliaciones de capital alcanzaron los 16.178,8 millones de euros, un 40,1% menos
Estos mínimos históricos se deben principalmente a los volúmenes registrados en el sector de las actividades financieras. La necesidad de este sector de apelar a las ampliaciones de capital es sensiblemente menor una vez que se ha acometido la reestructuración de la banca y el flujo de crédito permanece abierto y estable.
El importe del sector de actividades financieras y de seguros captado en ampliaciones de capital fue en julio de 398,4 millones de euros, un descenso del 82,1% en tasa interanual. El saldo acumulado en los siete primeros meses por este sector se situó en 4.318,3 millones de euros, un 49,5% menos y es además el importe más bajo registrado para este periodo desde 2005.
Por su parte, las actividades inmobiliarias también tuvieron un papel relevante en julio. Este sector registró ampliaciones por un importe total de 339,9 millones de euros, una cifra que implica un descenso del 24,2% en la comparativa interanual. Se confirma así la tendencia que durante todo el año está experimentando el sector inmobiliario, ya que en los primeros siete meses del año acumula un importe de 2.907,4 millones, unos niveles que no sólo son un 61,8% inferiores a los del año pasado por las mismas fechas, sino que representan el mínimo histórico para el sector para el periodo comprendido entre enero y julio.
Un total de nueve de los 20 sectores en los que Axesor clasifica la actividad económica cerraron el mes con descensos. Destacan especialmente otros dos: industria manufacturera y hostelería.
El sector manufacturero anotó un descenso en tasa interanual del 20,1% y se quedó en 55,6 millones de euros, si bien todavía conserva un incremento en el balance anual del 17,2%, con 863,4 millones de euros acumulados. Mientras, la hostelería está en términos negativos, tanto en julio como en el conjunto de los siete primeros meses del año. En el mes pasado, movilizó 64,8 millones de euros, lo que supuso una caída del 57,4% en comparación con el mismo mes de 2017. El saldo de los siete primeros meses es de 574,2 millones de euros, una caída del 18,9%.
CUATRO SECTORES EN MÍNIMOS HISTÓRICOS
En el acumulado del año, hay cuatro sectores que están en mínimos históricos: a las ya mencionadas actividades inmobiliarias se suma la construcción, con 1.997,2 millones de euros (-11,8% en la comparativa interanual), las actividades de agricultura, ganadería, silvicultura y pesca, con 288,7 millones de euros (-22,5% de descenso frente a enero-julio de 2017) y, por último, las actividades administrativas y de servicios auxiliares, con 228,4 millones de euros (-38,4%).
El sector de actividades profesionales científicas y técnicas registra un incremento del 237,1%
Un sector que no está en mínimos históricos es el de actividades profesionales científicas y técnicas, que el mes pasado despuntó con 458 millones de euros, un importe superior al de cualquier otro sector y que supone un incremento del 237,1% en comparación con julio de 2017. Eso sí, en el conjunto del año el sector va claramente a la baja: los importes movilizados son de 1.422 millones de euros, un 63,5% menos que en 2017 y el nivel más bajo desde el año 2015.
Por zonas geográficas, el País Vasco destaca en julio con 346,6 millones de euros, el nivel más alto para esta comunidad autónoma desde enero de 2017. Sin embargo, en el balance del año se sitúa en 916,6 millones de euros, un 7,2% menos que en 2017.
El ajuste lo lidera Madrid, con caídas superiores al 60% tanto en la comparativa de julio, como en la de los siete primeros meses del año. Esto se debe a que el año pasado la mayor parte del volumen se concentró en operaciones de reestructuración de los sectores bancario e inmobiliario que tuvieron lugar en esta comunidad. Este año, con la ausencia de esos catalizadores, los saldos fueron de 759,3 millones de euros en julio (-60,4%) y 6.102,3 millones de euros en el balance del año (-60,8%). Aun así, Madrid concentra casi el 40% de los importes movilizados en España a través de ampliaciones de capital.
