Elon Musk, adicto a la polémica: de Twitter a Tesla... sin olvidar el masaje

El hombre más rico del mundo es, sin duda, protagonista indiscutible en los últimos tiempos

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Bolsamania | 21 may, 2022

Ni Putin, ni Biden, ni Jerome Powell, ni Buffett, ni Jeff Bezos... Nadie hace sombra a Elon Musk, protagonista indiscutible del mundo económico a nivel global con su atípica forma de afrontar las situaciones, a golpe de tuit y, a ser posible, generando el mayor ruido y polémica posibles.

Recuerda la manera de actuar de Musk a la de Donald Trump en su momento. Tal vez por eso, al lanzar su OPA sobre Twitter, dejó claro que, si lograba hacerse con la compañía, pensaba readmitir al expresidente de EEUU, al que la red social vetó por su tendencia a 'dinamitar' todo con cada uno de sus mensajes.

Frente a Trump, a Elon Musk parece que nadie va a poder pararle. Ni el regulador estadounidense (SEC), que ya lo intentó en su momento, ni las multas, ni los escándalos... Él habla y habla enarbolando la bandera de la libertad de expresión y evidenciando que disfruta siendo el centro de atención.

OTRA SEMANA DE DESENFRENO

La semana pasada terminó con el tuit del CEO de Tesla anunciando que suspendía "temporalmente" su oferta sobre Twitter, y ésta ha acabado con el hombre más rico del mundo defendiéndose de acusaciones de acoso sexual y viajando a Brasil nada menos que para reunirse con otro personaje también controvertido, el presidente Jair Bolsonaro.

En medio de todo esto han pasado muchas cosas, que también se han ido aireando a través de las redes sociales y que han dejado claro que Elon Musk 'no se corta' y que, a la hora de contestar, también lo hace sin filtros.

Esto es lo que pasó con su ya famoso emoji de 'caca' en respuesta al CEO de Twitter, Parag Agrawal, que a principios de semana trataba de explicar que la compañía calcula de forma correcta las cuentas 'spam', defendiendo el ya famoso porcentaje de menos del 5% de 'bots', proporción que Musk no se cree, tal como dejo claro con su elocuente respuesta.

Mientras son muchos los que piensan que Elon Musk está presionando para pagar menos por Twitter -él mismo ha confirmado que estudia esta opción- e incluso abandonar la oferta, la directiva de Twitter ha dicho que tiene intención de hacerle cumplir con la proposición inicial acordada de 44.000 millones de dólares. A finales de semana, el consejero delegado de Tesla ironizaba y recalcaba que su foco sigue puesto en el fabricante de automóviles y que a la compra de Twitter le dedica menos del 5% de su tiempo, aludiendo a ese porcentaje mencionado arriba.

Precisamente, Tesla -que lleva acumulada una caída en bolsa en el año de más del 30% y que, según los analistas técnicos de Bolsamanía, se encuentra en un momento clave al filo de los 700 dólares- ha sido la protagonista de otra de las polémicas de estos días debido al enfado de su consejero delegado.

Elon Musk criticaba duramente el jueves, a través de una serie de tuits, la decisión de sacar al fabricante de coches eléctricos del S&P 500 ESG. La media se tomada alegando problemas relacionados con las condiciones laborales, e incluso el racismo, así como los accidentes en sus coches pilotados automáticamente. Musk escribía que ESG "es una estafa" y se mofaba de que, mientras Tesla está fuera, 10 petroleras están dentro.

Recordamos que los índices ESG miden el nivel de cumplimiento de criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo de las empresas.

También relacionado con Tesla, estos días se publicaba que Leo Koguan, el multimillonario que asegura ser el tercer mayor accionista individual de la compañía, ha pedido a ésta que lleva a cabo una recompra de acciones por valor de 15.000 millones de dólares después de las caídas registradas en bolsa.

LA 'GUINDA DEL PASTEL'

La 'guinda' al pastel de las polémicas la puso a finales de semana la noticia de 'Business Insider' sobre supuestos abusos sexuales por parte de Elon Musk a una auxiliar de vuelo de un avión de su compañía SpaceX. Musk negó en Twitter unas acusaciones que ha tachado de "salvajes". Posteriormente, bromeó sobre el tema e invitó a bautizar el escándalo con el nombre de "Elongate".

La información señala que SpaceX habría pagado 250.000 dólares de indemnización para tapar lo ocurrido. La mujer afirmó que, durante un masaje que ella le estaba dando, Musk "expuso su pene erecto, tocó su muslo sin su consentimiento y ofreció comprarle un caballo si realizaba actos sexuales". 'Business Insider' informó de que el supuesto incidente ocurrió en la habitación de Musk a bordo de un avión de SpaceX en un vuelo a Londres a finales de 2016, después de que la persona más rica del mundo le pidiera a la auxiliar que le diera un "masaje de cuerpo entero".

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