Interceptados dispositivos explosivos enviados a Obama y los Clinton

El Servicio Secreto desmiente que un tercer paquete explosivo haya sido enviado a la Casa Blanca

Bolsamanía
Bolsamania | 24 oct, 2018 16:39 - Actualizado: 20:27
obama clinton
Hillary Clinton y Baracj Obama (imagen de archivo).

El Servicio Secreto de Estados Unidos ha anunciado este miércoles que ha interceptado dos dispositivos explosivos enviados a la exsecretaria de Estado de Estados Unidos y candidata a la Casa Blanca Hillary Clinton y al expresidente del país Barack Obama.

En la tarde de este martes, 23 de octubre, "el Servicio Secreto (estadounidense) interceptó un paquete enviado a la ex primera dama Hillary Clinton en el condado de Westchester, Nueva York", indica en el comunicado publicado en su cuenta de Twitter. Y "en la mañana" de este miércoles, 24 de octubre, "un segundo paquete (explosivo) ha sido enviado a la casa del expresidente del Gobierno Barack Obama", el cual también fue interceptado, añade.

De esta manera, los paquetes fueron "identificados inmediatamente a través de procedimiento rutinario de detección de correo con potencial explosivo" y, en consecuencia, "fueron adecuadamente manejados" e interceptados. Así, los destinatarios (Obama y Clinton) no llegaron a recibir los paquetes explosivos ni han sufrido ningún riesgo.

"El Servicio Secreto ha iniciado una investigación criminal de alcance completo que aprovechará todos los recursos federales, estatales y locales para determinar la fuente de los paquetes e identificar a los responsables", concluye el comunicado.

Tras conocerse los hechos, Hillary Clinton ha declarado desde Florida que ella y su familia se encuentran bien "gracias a los hombres y mujeres del Servicio Secreto". "Cada día, estamos agradecidos por sus servicios y compromiso. Y, obviamente, hoy más que nunca", ha añadido la exsecretaria de Estado norteamericana.

DOS DÍAS DESPUÉS DE SOROS

También el FBI de Nueva York ha anunciado a través de su cuenta de Twitter que se ha hallado "un paquete sospechoso que se encuentra cerca de la residencia de Clinton en Chappaqua, Nueva York". En el mismo mensaje añaden que no harán más comentarios" por el momento, ya que es "una investigación en curso".

Dicho paquete sería similar, según la CBS, al hallado recientemente en casa del magnate estadounidense George Soros. Según recogió The New York Times, el empresario habría sido el objetivo de unos activistas de la extrema derecha de Estados Unidos y de Europa del Este.

Según la fuente citada por la CBS, el paquete enviado a los Clinton llegó por el servicio postal de Estados Unidos. La residencia de Hillary Clinton se encuentra a unas ocho millas de la residencia de Soros, a las afueras del norte de la ciudad de Nueva York.

OTRO PAQUETE EN LA CASA BLANCA

Además, el Time Warner Center de Nueva York, donde se encuentra la redacción de la CNN, ha sido desalojado por la presencia de otro paquete sospechoso.

Además, la cadena informaba del envío de otro paquete explosivo a la Casa Blanca. Sin embargo, el Servicio Secreto estadounidense lo ha desmentido en un tuit. "Las informaciones sobre un tercer paquete enviado a la Casa Blanca son incorrectas", ha aclarado.

Por su parte, la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, ha condenado estos "intentos de ataques violentos" contra figuras públicas. "Estos actos terroristas son despreciables", ha añadido, antes de advertir que "el Servicio Secreto de EEUU y otros agentes de aplicación de la ley están investigando (los hechos) y tomarán todas las medidas apropiadas para proteger a cualquier persona amenazada por estos cobardes".

A este rechazo se ha sumado el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pense, quien ha condenado desde su cuenta oficial de Twitter las "cobardes acciones" que "son despreciables y no tienen cabida" en Estados Unidos. Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se ha limitado a sumarse a las palabras de su 'número dos' con un corto mensaje en su cuenta personal de Twitter: "Estoy totalmente de acuerdo". Más tarde, en declaraciones ante los medios de comunicación, el jefe del Ejecutivo estadounidense ha afirmado estar "extremadamente triste y enfadado" con lo sucedido. "Llegaremos hasta el fondo (del asunto)", ha añadido.

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