Tras el silencio en el que se había instalado el Gobierno en las últimas semanas, ahora la estrategia es bien distinta
La estrategia de comunicación del Gobierno de Mariano Rajoy ha dado un giro desde el pasado fin de semana, cuando se anunciaron las medidas que se iban a adoptar en Cataluña en el marco de la aplicación del artículo 155 de la Constitución, que todavía necesitan el visto bueno del Senado. El jefe del Ejecutivo ha decidido abandonar el perfil bajo seguido hasta ahora por su gabinete en la crisis catalana y ha sacado a sus ministros a vender las 'bondades' del 155.
Sabedores de que las medidas del 155 pueden levantar ampollas, todos y cada uno de los miembros del gabinete de Rajoy se están esforzando por explicarlas muy bien
Desde principios de semana, los ministros del Gobierno de Rajoy se han prodigado en los medios para hablar de la “necesidad” de aplicar el 155 para restablecer la “legalidad” en Cataluña. El objetivo de esta nueva estrategia comunicativa es el de explicar tanto a los catalanes como a los españoles, pero también a los europeos, por qué se ha tomado esta decisión y qué es lo que se pretende con ella. Además, el Gobierno busca contrarrestar las acusaciones de los independentistas, que aseguran que el Ejecutivo español sólo persigue suspender la autonomía.
El pasado sábado, tras el Consejo de Ministros extraordinario, Moncloa daba a conocer cuáles eran las medidas que se pretenden adoptar en Cataluña si el Senado da el visto bueno a la aplicación del 155 planteada por el Gobierno. La Cámara alta decidirá el viernes, y si atiende a la petición de Rajoy y los suyos -algo que, casi con toda seguridad ocurrirá dada la mayoría que ostenta el PP en el Senado- todo el Govern será destituido, el Parlament verá limitadas sus funciones y tanto la Hacienda, como los Mossos d'Esquadra y TV3 y Catalunya Ràdio serán controlados desde Madrid por los ministerios correspondientes.
Se trata de medidas que pueden levantar ampollas y, sabedores de ello, todos y cada uno de los miembros del gabinete de Rajoy se están esforzando por explicarlas muy bien. El Gobierno ha decidido adoptar un tono más didáctico para tranquilizar a la ciudadanía ante una situación sin precedentes, ya que es la primera vez que se aplica el mencionado artículo de la Constitución en España. El objetivo es claro: hacer entender que al jefe del Ejecutivo central no le ha quedado más remedio ante la desobediencia del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y que además cuenta con el apoyo de PSOE y Ciudadanos, y el respaldo de Europa, en esta particular 'cruzada'.
No obstante, pese a la buena voluntad de los ministros, lo cierto es que algunos están teniendo más éxito que otros en esta peculiar labor que les ha 'encomendado' el presidente. Por ejemplo, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Saénz de Santamaría, es una de ellas. El mismo lunes la 'número dos' del Ejecutivo central concedió una entrevista a Onda Cero en la que dejó claros cuáles eran los pasos que se iban a seguir y con qué objetivo. Habló de las decisiones más inmediatas, como el cese de todo el gobierno de la Generalitat, pero avisó de que la aplicación del 155 será “progresiva” y que, por tanto, no se pueden descartar decisiones sobre aquellos que “sigan sin cumplir la Constitución y la ley” una vez se produzca la 'intervención', en referencia a los mandos de los Mossos o a los máximos responsables de los medios de comunicación públicos catalanes.
Incluso, en la entrevista Santamaría habló de la estrategia de comunicación del Gobierno en la crisis catalana, señalando que no se puede hablar de fracaso. Reconoció que los miembros del Ejecutivo central “tenemos que explicarnos en todos los ámbitos, también en el exterior”, aunque también aprovechó para recordar que “ya hay medios de comunicación como 'The Guardian' que están alertando de la agitación propagandística falsa de la Generalitat”. En los últimos días varios medios han hablado de las noticias falsas que se han difundido sobre la crisis en Cataluña desde el 1 de octubre, y Santamaría quiso ponerlo de relieve para defender la actuación del Ejecutivo hasta ahora y también la que emprenderá a partir de ahora, que es bien diferente.
LOS QUE NO HAN TENIDO TANTA 'SUERTE'
Otros ministros, sin embargo, no han tenido tanta suerte. Es el caso, por ejemplo, del titular de la cartera de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, que ha sido uno de los encargados de dar a conocer la versión del Gobierno en los canales internacionales. Concedió una entrevista a la BBC que suscitó una enorme polémica, no porque en ella rechazase que la Policía y la Guardia Civil ejercieran “brutalidad” el día del referéndum ilegal en Cataluña, el 1-O, sino porque aseguró que se difundieron muchas fotos y noticias falsas. Su afirmación sorprendió al entrevistador, por lo que Dastis tuvo que matizar: “No estoy diciendo que todas las fotos sean falsas, pero algunas sí. Estamos viendo un montón de hechos alternativos y 'fake news'. Pero no es un uso deliberado de la fuerza. Fueron provocados”, señaló en referencia a los agentes.
Dastis ha hablado de imágenes "falsas" de las cargas policiales del 1-O y Méndez de Vigo ha pedido una rectificación a 'The Times' por sus supuestas declaraciones sobre el uso de la fuerza en Cataluña
Asimismo, el ministro de Exteriores ha viajado esta semana a Estrasburgo para explicar la situación en Cataluña a los presidentes de los grupos políticos en la Eurocámara. En esta cita garantizó que el gobierno hará “todo lo necesario” para que tras la aplicación del artículo 155 no se repitan las imágenes de violencia que se vieron el 1-O, insistiendo en que muchas de ellas se “exageraron”.
Pero no fue lo único que dijo Dastis, que también aseguró que entre los objetivos del Gobierno está que todo se haga de manera “perfectamente pacífica” para “restaurar la convivencia en Cataluña” y para poder aplicar de nuevo la legislación catalana. Todo ello para lograr la “estabilidad necesaria” que permita “que los catalanes puedan expresar su voz en unas elecciones”.
Dastis ha sido uno de los encargados de 'vender' la falsedad de la propaganda independentista en sus intervenciones, algo que también ha hecho el ministro de Educación, Cultura y Deporte y portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, que concedió una entrevista al diario 'The Times' en la que, según ha asegurado, se han tergiversado sus palabras.
El diario británico señalaba que, según había confirmado Méndez de Vigo, los Mossos iban a hacer que “se cumpla la ley” y no iban a temblar a la hora de usar la fuerza si se producían protestas que amenacen el orden público tras la aplicación del artículo 155. Esas palabras tuvieron una gran repercusión, hasta el punto de que el propio ministro ha salido a corregir a 'The Times', al que además ha exigido que rectifique.
Según ha denunciado el ministro, se trata de “una tergiversación inaceptable” que se ha hecho tras “una hora y media de conversación”. “No voy a consentir a mi edad que venga nadie a decirme que yo he dicho una cosa con la que estoy radicalmente en contra”, ha asegurado Méndez de Vigo, que se ha esforzado por recalcar que “los actos de violencia no están en el ADN de este Gobierno”. Al portavoz del Ejecutivo, visiblemente molesto con lo ocurrido, no le ha salido bien su intento por hacer llegar la postura del Estado sobre la crisis catalana y el artículo 155. Tal es su enfado que ha exigido al diario una rectificación a través de una misiva, pero también ha escrito una carta al presidente de los corresponsales extranjeros en España y ha hablado con el embajador de Gran Bretaña en España para poner este caso en su conocimiento.
Los máximos responsables del Partido Popular también han iniciado un tour mediático para defender la postura del Ejecutivo
EL PP TAMBIÉN SE MOVILIZA
Aunque el Gobierno no ha sido el único que ha salido a defender el 155. Los máximos responsables del Partido Popular también han iniciado un tour mediático para defender la postura del Ejecutivo. En los últimos días se ha multiplicado la presencia de los altos cargos del partido. El coordinador general, Fernando Martínez-Maíllo; el vicesecretario de Comunicación, Pablo Casado; el portavoz del partido en el Congreso, Rafael Hernando; y el líder del PP en Cataluña, Xavier García Albiol, entre otros, se han preocupado mucho por salir a la palestra para hablar de la necesidad del 155 ante la deriva independentista.
Sus entrevistas en medios nacionales, ruedas de prensa y declaraciones antes de acudir a algún acto han sido la nota dominante desde el lunes, todo ello con el objetivo de contar “la verdad de lo que ocurre en Cataluña” y de trasladar un mensaje de “tranquilidad” a todos aquellos que ven con preocupación los acontecimientos políticos que se están desarrollando en la región. Además, desde el PP se han intensificado las llamadas a la cordura a Puigdemont y las peticiones para que dé un paso atrás antes de que sea demasiado tarde.