Evergrande presenta un plan para reestructurar 22.000 millones de deuda

El promotor inmobiliario más endeudado del mundo espera que la reestructuración entre en vigor el 1 de octubre y ha ofrecido a sus acreedores opciones para canjear su deuda por notas nuevas con vencimientos a 10 y 12 años o en instrumentos vinculados a acciones respaldados por el grupo y sus dos empresas cotizadas en Hong Kong, Evergrande Property Services Group y Evergrande New Energy Vehicle Group.

“La reestructuración propuesta aliviará la presión del endeudamiento de la empresa en el extranjero y facilitará los esfuerzos de la empresa para reanudar las operaciones y resolver los problemas en tierra”, ha indicado la firma.

Con más de 300.000 millones de dólares en pasivos totales, incluida la deuda ‘offshore’, Evergrande ha estado en el centro de la crisis inmobiliaria china del pasado 2022. Aunque la propuesta podría dar un respiro a la promotora, que hace un año estuvo al borde del colapso, pocos analistas esperan que su balance se recupere por completo a corto plazo. La firma de origen cantonés espera que la reestructuración propuesta facilite la reanudación ordenada de las operaciones comerciales y la generación gradual de flujo de caja para el reembolso de la deuda.

Asimismo, la compañía de Guangzhou se ha comprometido a hacer “todo lo posible para restaurar un ecosistema saludable de capital y negocios, reparar su estructura de capital y estabilizar sus operaciones comerciales”. Sidley Austin y Houlihan Lokey son los asesores de Evergrande, mientras que Moelis & Company y Kirkland & Ellis asesoran al grupo de obligacionistas.

Por otra parte, la comercialización de sus acciones en Hong Kong ha estado suspendido desde el pasado mes de marzo, a la espera de la publicación de los estados financieros, y Evergrande dijo en la presentación del miércoles que permanecerá suspendido hasta nuevo aviso. Asimismo, el grupo inmobiliario reconoció que necesitará una financiación adicional de entre 250.000 y 300.000 millones de yuanes (36.000-43.000 millones de dólares) para reanudar sus operaciones en los próximos tres años.

“Como resultado, la capacidad de la empresa para pagar la deuda no garantizada es relativamente débil”, añadieron, al tiempo que indicaron que se espera que el flujo de caja libre aumente gradualmente a partir del cuarto año, suponiendo que la empresa pueda reanudar sus operaciones normales.

“En general, no estamos muy satisfechos con él, ya que no hay más mejoras crediticias y los nuevos plazos son demasiado largos”, ha indicado Sunny Jiang, jefe de inversiones de renta fija de Haitong International Asset Management, en declaraciones recogidas por ‘Reuters’. Según este experto, preocupa “que pueda ser un mal ejemplo para otros promotores que estén estudiando sus propuestas de reestructuración y podría ser aún más difícil para los tenedores de bonos recuperar su inversión”.

Algunos tenedores de bonos han estado presionando a Evergrande para que endulce el acuerdo de reestructuración con activos nacionales, pero las propuestas del grupo no incluían tales términos. Según algunos analistas, de llevarse a cabo este plan, es probable que más promotores utilicen la estrategia de agotar la paciencia de los inversores antes de ofrecer un plan de reestructuración desfavorable para los acreedores.

Un representante del solicitante de la liquidación de Evergrande, Top Shine Global, dijo a ‘Reuters’ el pasado jueves que la empresa de inversión todavía estaba estudiando la propuesta para ver si apoyaba el plan o seguía adelante con la solicitud de liquidación.