El sufrimiento de la libra y la inflación acercan al BoE a una subida del 0,75%

El mercado, completamente dividido sobre si el incremento será de 50 o 75 puntos básicos

El banco central sopesará el impacto de las medidas de Truss en los precios

Noemí Jansana
Bolsamania | 22 sep, 2022 06:00 - Actualizado: 07:35
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El Banco de Inglaterra (BoE) celebra su cónclave bancario este jueves, como guinda a una semana en que un largo número de autoridades monetarias han dado a conocer sus decisiones de tipos para combatir la inflación. El banco central de Reino Unido decidió aplazar por primera vez en su historia la decisión sobre los tipos de interés tras la muerte de Isabel II, por lo que el destino ha querido que sea su turno tras la Reserva Federal de EEUU y después de que la libra se haya desplomado a un nuevo mínimo de 37 años. En su cruce contra el dólar ha tocado los 1,1220 dólares el 22 de septiembre.

El organismo británico ha subido las tasas en las seis últimas reuniones, la última vez un 0,5%, y se espera como mínimo un incremento igual de los tipos de referencia. Sin embargo, el mercado encara la reunión del Comité de Política Monetaria de 'la vieja dama de la calle Threadneedle' muy dividido sobre si se contentará por 50 puntos básicos o se inclinará por emular a la Fed y al Banco Central Europeo (BCE) y se unirá al club de los incrementos de 75 puntos básicos.

"El BoE tiene la tendencia de dar sorpresas de 'paloma' en sus reuniones", señalan desde Danske Bank, quienes se posicionan en la banda del 0,5% -por lo que los tipos subirán hasta el 2,25%-. Además, añaden, "el Banco de Inglaterra fue el primer banco central del G10 en pronosticar una recesión para el cuarto trimestre de 2022 en su última reunión, al tiempo que utilizó una valoración del mercado mucho más pesimista que la actual". Teniendo en cuenta que "las perspectivas de crecimiento parecen considerablemente peores ahora que entonces por los precios actuales del mercado", insisten en que no se atreverá con una subida del 0,75%.

En cambio, otros expertos creen que la única forma de frenar la sangría de la libra es elevar los tipos hasta el 2,50% -es decir, 75 puntos básicos-. "Las presiones salariales están aumentando rápidamente, las expectativas de inflación siguen siendo elevadas y la relajación fiscal presionará al Comité del BoE", aducen desde TD Securuties. Ofrecen estos expertos un preciso vaticinio y creen que tamaño incremento "obtendrá 6 votos a favor". Además, se decidirá por unanimidad el inicio de las ventas activas de bonos ('gilt') a un ritmo de 10.000 millones de libras esterlinas al trimestre.

¿QUÉ PASARÁ CON LA INFLACIÓN TRAS LAS MEDIDAS DE TRUSS?

Dejando de lado la divisa, la inflación es el otro punto caliente que deba abordar el BoE. Tras las medidas del nuevo Gobierno de Liz Truss, que incluirá un tope en las facturas de energía de los hogares, se prevé un cambio de expectativas en el banco central y se espera una revisión a la baja. En su anterior reunión, el Banco de Inglaterra preveía que la inflación alcanzaría el 13,3% a finales de este año, y bancos como Citi y Goldman Sachs pronosticaban unos índices de precios al consumo desorbitados a principios del próximo año.

Según las primeras estimaciones de la Oficina Nacional de Estadísticas, la inflación general del Reino Unido descendió al 9,9% anual en agosto, frente al 10,1% de julio, gracias a la caída de los carburantes. Pero los analistas han advertido que el apoyo adicional del gobierno podría dar lugar a una mayor inflación a medio plazo mientras que el Comité de Política Monetaria también se enfrenta a un crecimiento lento y a un mercado laboral muy ajustado.

Precisamente, el pesimismo que suscitan los datos económicos del país, unido al paquete energético del Gobierno, que será un punto de inflexión, hace apostar a los expertos de Barclays por que el BoE envíe un mensaje de endurecimiento gradual. De hecho, indican que la de este jueves será una reunión de transición y que se cambiará la narrativa en el cónclave de noviembre, cuando el banco pueda recalibrar sus proyecciones macroeconómicas.

Junto a los analistas de ING esperan un incremento del 0,5%, de cara a noviembre, divergen estos bancos: los primeros creen que las tasas subirán un 0,25%, mientras que los segundos apuestan por otros 50 puntos básicos dentro de dos meses para cerrar el año con un incremento del 0,25% en diciembre.

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