Cierre bajista en Wall Street, con un petróleo que sigue imparable

Wall Street cierra la sesión del miércoles con pérdidas (Dow Jones: -0,81%; S&P 500: -1,08%; Nasdaq: -0,73%) tras las ganancias de las dos primeras jornadas de la semana. Los índices neoyorquinos pierden terreno, mientras los inversores se preguntan si continuará el rally de corto plazo iniciado desde los mínimos de mediados de mayo.

En este sentido, los expertos de Bank of America afirman que "el pesimismo extremo favorece un rally alcista de corto plazo", ya que su indicador 'Alcista-Bajista' ha bajado hasta 0,4 veces, lo que señala un "sentimiento bajista extremo", que a su vez ha activado una clara señal de compra para el corto plazo.

¿Significa esto que el mercado bajista ha terminado? Para estos expertos, nada más lejos de la realidad. Porque incluso si el S&P 500 rebotara hasta 4.400 puntos, consideran que sería una clara oportunidad para "abrir posiciones cortas" o seguir reduciendo el riesgo en las carteras.

En su opinión, el mercado bajista no terminará hasta que la Fed cambie su política monetaria, algo que no ocurrirá hasta que la economía americana comience a destruir empleo.

EL S&P 500 ESTIRA SU REBOTE

Por análisis técnico, el S&P 500 superó a finales de mayo la resistencia de 4.090 puntos. "Estaremos muy pendientes de un cierre por encima de los 4.177 puntos. Esta sería la señal que nos confirmaría la extensión del rebote que se podría extender hasta el siguiente nivel de resistencia que presenta en los 4.307 puntos", afirma César Nuez, analista de Bolsamanía.

"La media de 200 sesiones se encuentra en los 4.400 puntos. Mientras que se mantenga cotizando por debajo de este promedio, debemos extremar la prudencia, ya que su tendencia a medio y largo plazo es complicada", añade este experto, que menciona el mismo nivel de precios que los expertos de BofA.

LA OCDE RECORTA PREVISIONES

En línea con el recorte de previsiones anunciado este martes por el Banco Mundial, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha recortado sus estimaciones de crecimiento y ha elevado las de inflación, debido al efecto negativo de la guerra en Ucrania y de los confinamientos en China.

La OCDE prevé ahora un crecimiento mundial del 3% para 2022, frente a su anterior previsión de diciembre del 4,5%. Además, ha duplicado su estimación de inflación hasta el 8,5% desde el 4,2%.

"La magnitud de cuánto más bajo será el crecimiento y cuánto más alta la inflación dependerá de cómo evolucione la guerra", ha subrayado la economista jefa de la OCDE, Laurence Boone.

Recordamos que los inversores están pendientes de los datos de inflación que se publicarán este viernes en EEUU, con la esperanza de que los precios hayan tocado techo. En este sentido, Janet Yellen, secretaria del Tesoro, comentó este martes que la elevada inflación en EEUU es "inaceptable" y anticipó medidas para intentar controlarla en alianza con la Reserva Federal (Fed).

EMPRESAS Y OTROS MERCADOS

A nivel empresarial, Moderna ha subido un 2,11% después de anunciar que su vacuna mRNA-1273.214, candidata a dosis de refuerzo de COVID, cumple con todos los criterios de valoración preestablecidos, incluida una respuesta superior de anticuerpos neutralizantes contra la variante Omicron un mes después de la administración.

Intel, en cambio, ha caído un 5,28% tras las declaraciones de David Zinsner, director financiero de la compañía, en una conferencia de Bank of America, en la que hizo referencia a que la empresa todavía estaba luchando con el inventario relacionado con los bloqueos de Covid-19 en China. Estas referencias han llevado a Citi a predecir un escenario bajista y un previo anuncio negativo en los datos económicos del segundo trimestre de Intel.

Por otro lado, el presidente de la Comisión de Bolsa y Valores de EEUU, (SEC), Gary Gensler, ha revelado un plan para cambiar las reglas en que Wall Street maneja las transacciones bursátiles minoristas, tras las dudas generadas el año pasado sobre si los inversores familiares estaban obteniendo un mejor precio. Esta reorganización, la mayor en el mercado de valores de EEUU en más de una década, requerirá que las órdenes minoristas se envíen a subastas para impulsar la competencia.

El precio del petróleo, por su parte, continúa disparado. El barril West Texas ha subido un 2,77% ($122,72) y el Brent ha avanzado un 2,98% ($124,15), lo que complica mucho la tarea de los bancos centrales.

En otros mercados, el euro se ha apreciado un 0,14% ($1,0712). Además, la onza de oro ha subido un 0,16% ($1.855); y la rentabilidad del bono americano a 10 años ha repuntado al 3,034%. Por último, el bitcoin ha cedido un 2,20% ($30.121).