Voluntariado y experiencia laboral

El voluntariado realizado en el pasado o el que se realiza en el momento de buscar trabajo, puede ser un buen aliado y complemento de nuestros curriculums.

como buscar trabajo, empleo mayores de 40 años, buscar trabajo 2020

No resulta ninguna novedad afirmar que hoy en día la experiencia laboral resulta básica cuando tratamos de obtener un empleo. Sin embargo, la propia dinámica del mercado laboral en los últimos años hace que resulte difícil, sobre todo para la gente joven, acumular este tipo de experiencias. En este caso hay otros elementos que también podemos aportar y que pueden resultar igualmente interesantes cuando se valore nuestra candidatura: uno de ellos es el de las experiencias de voluntariado.

Ojo, no debemos caer en el error de pensar que las experiencias de voluntariado pueden ser directamente un sustituto de la falta de experiencia laboral, esto no es así: la experiencia laboral, sobre todo referenciada al puesto de trabajo al que se aspira, sigue siendo fundamental y de mayor peso que otras cuestiones complementarias.

El voluntariado

Dicho lo anterior debemos tener cuenta que efectivamente el voluntariado se considera un elemento complementario muy interesante en muchos casos, y, puede convertirse en un buen complemento de un currículum con poca experiencia laboral acumulada.

En general el concepto de voluntariado es bastante conocido, lo más frecuente tiene que ver con la puesta a disposición de entidades u organismos para los que realizaremos tareas concretas con fines solidarios, tareas voluntarias durante un periodo de tiempo que puede ir desde tan sólo unas semanas hasta periodos mucho más largos.

Frecuentemente estas tareas no van a tener una remuneración económica más allá de la asunción de los gastos generados, aunque, existen voluntariado retribuidos mucho más especializados.

Voluntariado y experiencia laboral

Las actividades de voluntariado pueden ser recogidas como experiencia laboral, pero el peso que generen sobre nuestro currículum es muy variable. Por ejemplo las prácticas de voluntariado internacional en escenarios complejos como por ejemplo África resulta tremendamente amplias y poder tener escenarios de lo más diverso que van desde ámbitos como la sanidad hasta la educación, pero pasando prácticamente por todos los sectores y segmentos presentes en nuestro mercado laboral.

 La oferta de voluntariado es amplia aunque, afortunadamente, también cada vez más regulada la búsqueda a través de Internet puede ponernos en conexión con muchas opciones abiertas, aunque, debemos saber que organismos como el servicio voluntario europeo, que suele ofrecer un gran número de plazas anualmente, dibuja sus proyecciones a un plazo largo, es decir, no será tan sencillo a través de este canal encontrar una convocatoria de un día para otro.

Qué aporta el voluntariado

Realmente, si lo pensamos un poco, veremos cómo el voluntariado si aporta elementos muy interesantes para el reclutador, aunque hay más nos dejaríamos fundamentalmente en tres:

  • Disponibilidad y acción: hoy en día se valora muchísimo la disponibilidad y la propensión a la actividad, el hecho de no haberse detenido por ejemplo al finalizar los estudios y realizar labores de voluntariado, o, compatibilizar los estudios con labores de voluntariado se valora de manera positiva en este sentido.
  • Valores profesionales adquiridos: cuando el voluntariado se ha realizado alrededor de las áreas de trabajo en las que se desenvuelve la empresa ese valor añadido en la experiencia adquirida también se tiene muy en cuenta, no debemos pensar que esto se circunscribe sólo a sectores como la sanidad o la educación, también ámbitos tan dispares como el deporte o la construcción entre otros pueden y tienen su hueco.
  • Valores humanos: solemos hablar mucho de la deshumanización del trabajo, en cierta medida esto es real, pero no nos podemos olvidar del factor humano, factor que también los reclutadores tienen muy en cuenta y que está por supuesto muy presente en las experiencias de voluntariado.

Publicidad