De Credit Suisse a Deutsche: "Pérdida de confianza en la banca por su mala gestión"

La entidad alemana pasa a estar en el punto de mira del mercado en medio de la crisis financiera

Nieves Amigo
Bolsamania | 25 mar, 2023 06:00
dl deutsche bank db banking office financial services trading markets frankfurt germany building logo pb
Deutsche BankSharecast / Sabine Felidae via Pixabay

Después de una semana marcada por la incertidumbre, pero más tranquila en cuanto a novedades relacionadas con la crisis bancaria, este viernes todo volvía a implosionar de nuevo de la mano de Deutsche Bank. Junto a Credit Suisse, Deutsche es probablemente el otro banco europeo que más problemas arrastra en los últimos años y seguramente por eso se ha convertido en el nuevo objetivo de esta crisis financiera.

La incertidumbre por lo que deparará esta crisis mantiene al mercado en vilo y absolutamente presionado

“Más que una crisis bancaria, lo que estamos viendo es una pérdida de confianza en los bancos por una mala gestión en un contexto complicado’’, reconoce Pedro del Pozo, director de inversiones financieras en Mutualidad de la Abogacía. En este sentido, Generali Investmets considera que "tanto la quiebra de Silicon Valley Bank (SVB) como la absorción forzosa de Credit Suisse por UBS son el resultado de una mala gobernanza". Esto, junto con un contexto de "normalización extremadamente rápida de la política monetaria", ha dado lugar a la perdida de confianza de los clientes, con la retira de sus fondos de las entidades consideradas débiles, afirman desde Generali.

Deutsche se hundía en la última jornada bursátil de la semana después de que sus seguros de impago (CDS) comenzaran a subir con fuerza en la sesión previa. Todo parece indicar que la entidad puede convertirse en el siguiente foco de atención del mercado tras la venta de Credit Suisse a UBS. Pese a que el banco germano ha intentado sanear su balance en los últimos años, lo cierto es que siempre ha sido considerado un banco débil dentro del sistema financiero de la eurozona.

MUCHAS MEDIDAS... PERO SIGUE LA DESCONFIANZA

Los reguladores financieros y los gobiernos han tomado múltiples medidas en las últimas semanas a ambos lados del Atlántico para contener el riesgo de contagio entre las entidades financieras. El Banco Nacional Suizo (SNB) dijo este jueves, en el comunicado de su reunión de política monetaria, que las medidas anunciadas a finales de la semana pasada por el Gobierno federal, la autoridad suiza supervisora del mercado financiero (Finma) y el propio banco central "han puesto fin a la crisis".

La agencia Moody's, por su parte, escribía en una nota este miércoles que todas las medidas para salvar la situación deberían "tener éxito en términos generales".

Pese a todo, el mercado no acaba de creerse que esta crisis vaya a terminar pronto. La propia Moody's reconoce que existe el riesgo de que los responsables políticos sean incapaces de frenar la actual agitación sin repercusiones más duraderas y potencialmente más graves dentro y fuera del sector bancario.

Esa incertidumbre es la que mantiene al mercado en vilo y absolutamente presionado. El miedo por no saber qué impacto final va a tener toda esta crisis financiera desde el punto de vista económico, y el miedo a que vayan cayendo bancos en un efecto dominó difícil de frenar a medida que sus clientes pierden la confianza y retiran los depósitos.

Goldman Sachs reconoce que es posible que la actual crisis financiera se convierta finalmente en un lastre para la actividad económica, tanto en EEUU como en la eurozona. Según explica, es probable que algunos bancos pequeños y medianos de EEUU sigan enfrentándose a dificultades, lo que llevaría a un endurecimiento de las normas de concesión de préstamos que se espera reste entre 0,3 y 0,5 puntos porcentuales al crecimiento del PIB.

En la eurozona, el sector bancario parece resistente, pero se espera que las condiciones crediticias también se endurezcan, lo que afectaría al crecimiento entre 0,3 y 0,4 puntos porcentuales, señala Goldman.

"Las tensiones en el sector bancario representan un obstáculo, aunque no un retroceso total, para el reciente impulso del crecimiento, si bien los riesgos se inclinan a la baja en caso de nuevas quiebras bancarias o continuas salidas de depósitos", añade Goldman Sachs.

contador