La hora de los Préstamos para Estudios

A estas alturas del mes de Septiembre, cuando ya comienza en muchos casos el periodo lectivo para los más pequeños, y, se acerca el momento del comienzo de curso de los estudios superiores o profesionales, llega el momento en el que cobran especial sentido unos productos bancarios que, por regla general, durante el resto de temporada no tienen prácticamente movimiento. Nos referimos a los préstamos orientados al estudio.

A pesar de que la oferta de este tipo de créditos se ha diversificado y especializado realmente mucho en los últimos años, llegando a contemplar posibilidades a la hora de la financiación que antes no se contemplaban fuera de los productos de financiación estándar, debemos distinguir dos grandes grupos dentro de estos préstamos.

El primero de estos grupos sería el de los productos directamente orientados a las matriculaciones y gastos de estudios superiores. Un grupo en el que, a su vez, vamos a encontrar diferentes opciones, desde opciones más locales que potencian la matriculación en sus ámbitos de influencia, como puede ser el caso de la propuesta de Caja Murcia, una propuesta que potencia las matriculaciones en la universidad local con una oferta de producto realmente interesante, hasta opciones más generales que, incluso contemplan los estudios superiores en el extranjero como susceptibles de ser financiados.

Las características medias de este tipo de productos suelen tener en común facilidades de devolución con amplios periodos de carencia así como intereses asumibles en comparación, por ejemplo, con la media de los que presentan los préstamos al consumo.

El otro gran grupo de préstamos orientados al estudio tienen que ver con los Master o cursos de postgrado, una continuación de la formación cada vez más presente en el conjunto de estudios al que los usuarios pretenden acceder y que, conlleva una serie de gastos importantes que comienzan por la propia matriculación y continúan, en el caso de realizarse en destinos diferentes a la localidad de residencia de los estudiantes, con gastos de desplazamiento, estancia, etc.

También para este tipo de estudios existe una oferta específica que, incluso, podríamos llegar a considerar superior en volumen a la del anterior grupo.

Son muchas las entidades bancarias que poseen una oferta de este tipo de productos específica en la cual buscan dar respuesta precisamente a esos gastos citados anteriormente.

La media de estas propuestas viene a proponernos dos modelos de préstamos según el objeto; préstamos más orientados a la matriculación y gastos inmediatos, cuyo importe máximo de financiación (sin exceder cantidades límite fijadas previamente por la entidad) coincidirá con, precisamente, los costes de matriculaciones, tasas y gastos que alrededor del proceso de matriculación surjan, y, por otro lado, los préstamos más amplios que pueden contemplar dentro de los conceptos financiables elementos como viajes, desplazamientos o materiales necesarios para el desarrollo del master o postgrado, este último modelo de producto resulta obviamente más amplio, pero, también resultará más caro en lo que a intereses se refiere.

Imagen 1: Jayel Aheram Flickr Creative Commons

Imagen 2 : scui3asteveo Flickr Creative Commons

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