La preapertura según Link Análisis
Los inversores "huyen" de los activos de mayor riesgo
Tras el resultado del referéndum griego, en el que el "No" se ha impuesto con claridad, la posibilidad de que Grecia salga de la Zona Euro presionará con fuerza a la baja a la renta variable europea cuando abran hoy los mercados.
Además, los mercados de bonos periféricos
sufrirán un duro castigo de inicio, mientras los inversores "huyen" de los activos considerados de
mayor riesgo hacia los de corte más defensivo como los bonos alemanes o los Treasuries
estadounidenses.
El euro, por su parte, se ha depreciado con fuerza esta madrugada en los mercados asiáticos, aunque posteriormente ha recuperado algo de terreno. De hecho, ahora cede
algo menos del 1% respecto al dólar estadounidense, manteniéndose estable por encima de los 1,10
dólares por euro.
Esta reacción de los mercados financieros europeos es, en gran media, producto de la complacencia
mostrada durante todos estos meses en los que las interminables negociaciones entre el gobierno
radical de izquierda griego y los acreedores y socios del país no terminaban de cuajar mientras que
los inversores daban por hecho de que al final, como ha venido ocurriendo siempre en la Eurozona,
se alcanzaría un acuerdo político para "dar una patada hacia delante" al problema griego. Sin
embargo, el órdago lanzado la semana pasada por el primer ministro griego, Tsipras, convocando un
referéndum para votar sobre una propuesta de los acreedores del país que ya no estaba sobre la
mesa, creemos que, si no ha "roto todos los puentes" de forma definitiva, los ha dejado muy
maltrechos.
Tsipras ha logrado una "gran victoria" interna, que era lo que pretendía desde el principio
-con la dimisión del líder de la oposición, Samaras, Syriza se queda prácticamente sin oposición
efectiva en la política griega-, pero las consecuencias para el país pueden ser dramáticas en el
corto/medio plazo.
El resultado del referéndum hace casi imposible que, salvo "cabriola" de última
hora por parte del Gobierno de Grecia, el país alcance un acuerdo con sus socios y acreedores, ya
que estos no van a conceder nuevas ayudas sin ningún tipo de condicionante. Además, las
relaciones con el Gobierno griego son ahora de gran desconfianza, lo que dificulta aún más el
acercamiento.
Lo que sí es evidente es que la situación económica y financiera de Grecia se va a
deteriorar a marchas forzadas ante la imposibilidad de que abran sus bancos, teniendo el país una
nueva fecha límite para lograr nueva financiación por parte de sus socios y acreedores en el día 20
de julio, cuando vencen EUR 3.500 millones que Grecia debe hacer efectivos al BCE.
Entendemos
que HOY la máxima autoridad monetaria de la Zona Euro se decantará por mantener el importe del
programa de liquidez de emergencia (ELA) sin cambios en los EUR 89.000 millones que ya ha
concedido, a pesar de la petición del Banco Central de Grecia de nuevos fondos. No obstante, si
Grecia impaga el día 20, el BCE es muy probable que dé por finalizado el ELA con lo que el Banco
Central del país se vería forzado a acuñar nueva moneda para impedir el colapso de sus bancos, lo
que sería el principio del fin de Grecia en el euro.
A pesar de que esperamos que la reacción de los mercados sea muy negativa en un principio, está
por ver si la corrección va a ser duradera o la actuación del BCE, que esperamos, logra tranquilizar a
los inversores. Habrá que estar, por tanto, muy atentos al comportamiento de la deuda de países
como España, Portugal e Italia para determinar hasta qué punto la actuación del BCE está siendo
eficaz.
Dicho esto, señalar que las siguiente "citas" en el "drama griego" son:
i) HOY la reunión del BCE en
la que se decidirá qué hacer con el ELA, como ya hemos señalado;
ii) MAÑANA la cumbre
extraordinaria de líderes de la Zona Euro, en la que se tratará el tema griego y de la que no creemos
que salga nada concreto; y
iii) a lo largo de la semana se espera una reunión del Eurogrupo para
tratar los efectos de la "crisis griega".
De momento, por tanto, no esperamos un rápido acuerdo entre
las partes, ya que las posturas están ahora más lejanas que nunca. No obstante, cualquier atisbo de
acercamiento entre Grecia y sus socios y acreedores será muy bien recibido por los mercados. En
este sentido, la dimisión del ministro de Finanzas griego, Varufakis, anunciada esta madrugada,
creemos que es positiva de reanudarse las conversaciones, dada la animadversión que sienten
muchos ministro de Finanzas de la Eurozona respecto a su persona.
Por tanto, "la crisis griega" seguirá monopolizando, en este caso para mal, la atención de los
inversores esta semana, dejando en un segundo plano temas que en otros momentos habrían tenido
gran trascendencia para los mercados como el desplome de la bolsa china y los innumerables
intentos de las autoridades del país para evitar que siga cayendo o el inicio oficioso en Wall Street
esta semana de la temporada de presentaciones de resultados trimestrales cuando la multinacional
del aluminio Alcoa dé a conocer sus cifras el próximo miércoles.