test

El ex presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, ha comenzado su experiencia como bloguero con energía y con un debate con Larry Summers sobre la teoría del estancamiento secular y cómo combatir este escenario en busca de la meta de pleno empleo.

Lea también: La controvertida teoría económica que tiene preocupada a Janet Yellen

Los apenas tres días de la versión Bernanke 2.0 han dado para mucho. El encargado de diseñar la política monetaria para luchar contra la crisis financiera que golpeaba a Estados Unidos se estrenó el viernes en Twitter y, a la vez, como bloguero en la institución Brooking Institution. Tras defender unos tipos “excepcionalmente bajos” en las economías desarrolladas, ha analizado el fenómeno de estancamiento secular (secular stagnation) que puso de moda Larry Summers, economista estadounidense y secretario del Tesoro durante la Administración de Bill Clinton. Precisamente con Summers es con quien se ha enzarzado en un debate en el blog del think tank en torno a la teoría económica que preocupa a Janet Yellen.

LA TEORÍA DEL ESTANCAMIENTO SECULAR

La teoría del 'estancamiento secular' fue inicialmente acuñada por Alvin Hansen en 1938, recuerda en su blog Bernanke. Se refirió a que ante una desaceleración del crecimiento de la población y en un periodo de avances tecnológicos, las empresas no tienen incentivos para invertir en capital físico, lo que provocaría estar ante una economía deprimida. Por ello, serían el gasto público y el consumo de los hogares los factores que deberían tirar de la economía.

El ex presidente de la Fed explica que esta teoría resultó errónea al no poder anticipar el auge económico de posguerra. Sin embargo, Summers sí converge con la teoría de Hansen, la cuál para él resultó prematura y no fallida. De este modo, para Summers, el patrón reciente de escaso crecimiento económico y baja inflación es consistente con la hipótesis de estancamiento secular. Además, el ex secretario del Tesoro recuerda que las tasas de crecimiento industrial a largo plazo se han reducido a la baja en los últimos años. “Vale la pena tomar esta posibilidad en serio”, asevera en su entrada.

Hay varios puntos de fricción entre Summers y Bernanke, que por ahora ha sido el último en publicar un artículo este mismo miércoles. En resumen, Summers cree que la posibilidad de que la economía global y, en concreto Estados Unidos, se enfrenten a un estancamiento secular es bastante elevada. Es algo que preocupa a Yellen, porque si sucede, las autoridades monetarias ya no tendrían margen de actuación y habría que olvidarse de la normalización de tipos.

Summers considera que la política monetaria es incapaz pos sí sola de generar crecimiento sostenible y perseguir la meta del pleno empleo. Por ello, debería ir acompañada de una política fiscal expansiva que busque un retorno en sus inversiones (multiplicador keynesiano) para asegurar la recuperación económica. Frente al problema de elevar déficit y la deuda, arguye que con tipos reducidos es más barato emitir deuda soberana y que es importante no permitir que el PIB se reduzca en la ratio Deuda/PIB para que el stock de deuda sea sostenible.

Por el contrario, Bernanke defiende la política monetaria como eje para lograr el pleno empleo y recuerda que el gasto público no es ilimitado por parte de los Estados. Es escéptico respecto al riesgo de un 'estancamiento secular' por la modernización de la economía en la que hay grandes empresas que no invierten en capital físico (por ejemplo Facebook), y por lo tanto la proyección no se debe basar únicamente en la evolución industrial.

TIPOS DE INTERÉS REALES

Otro punto de desencuentro está en cómo los tipos de interés pueden conducir al ahorro e inversión a un nuevo equilibro. ¿Se pueden mantener tasas de interés reales (tasa de interés nominal menos tasa de inflación) en niveles negativos de forma estable en el tiempo? Hay que tener en cuenta que la incertidumbre económica provoca que se priorice el ahorro frente a la inversión. Sin embargo, con tipos de interés reales negativos el incentivo es al contrario.

El ex presidente de la Fed defiende que con un tipo de interés nominal en torno al 0%, y un objetivo de inflación del 2%, sí puede haber tasa de interés real negativa. Algo que contradice Summers: no es del todo realista que la economía actual genere una inflación del 2% aunque sea el objetivo de la autoridad monetaria. De todos modos, el ex secretario del Tesoro no cuestiona el éxito de la política monetaria de la Reserva Federal en los últimos años, sino que le parece insuficiente. Defiende la política de gasto público como el instrumento natural para promover el crecimiento. “Los macroeconomistas pueden contribuir moviéndose más allá de sus modelos tradicionales de los ciclos económicos para contemplar la posibilidad de estancamiento secular”, reclamó Alan Summers.

Lee además:

Bernanke 2.0: estrena blog con una defensa de los tipos "excepcionalmente bajos"

Yellen: "Espero que las condiciones justifiquen la normalización de tipos este año"

contador