ERC y JxCat se avienen a negociar una abstención a Sánchez, "pero no gratis"
La repetición electoral del 10N ha abocado al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, a vivir su particular ‘día de la marmota’ ante la ausencia de cambios significativos en la correlación de partidos. La aritmética parlamentaria arroja una suma de fueras para la investidura y la gobernabilidad que pasa irremediablemente por los independentistas y por la coalición con Unidas Podemos, en peores condiciones que el 28 de abril. Ya sea para lograr una abstención o un hipotético voto favorable, los socialistas “hablarán con ERC”, reconocen desde el partido.