Nueva jornada negra para Espirto Santo. Las acciones del banco se dejan otro 7% en el mercado y amplían sus caídas en lo que va de año por encima del 20% después de que la agencia de calificación Moody's haya puesto en revisión a la entidad para una posible rebaja de nota de las cédulas hipotecarias emitidas por la entidad lusa, así como sus depósitos.
Actualmente, la nota de la entidad es de "Ba3", equivalente a "bono basura", por lo que si finalmente ese corte se produce, su calificación se degradará un escalón más pasará a convertirse en una "inversión altamente especulativa".
Los analistas de Moody's justifican su decisión por "los reveses en materia de gobierno corporativo, evidenciados por el inesperado anuncio de una asamblea general para el próximo 31 de julio".
El banco pasa por uno de los momentos más convulsos de su historia en un ambiente de abierta división en el seno de la familia que controla el grupo del que forma parte la entidad, y donde se han detectado irregularidades contables. La familia Espírito Santo es una de las más ricas, influyentes y poderosas de Portugal desde principios del siglo pasado.