Mike Coupe, consejero delegado de Sainsbury's, dejará su cargo a finales de mayo después de seis años al frente del grupo. La compañía de supermercados opta por la continuidad y ha elegido a Simon Roberts, director de ventas minoristas, para sustituirle.
Coupe ha estado en entredicho desde abril, cuando el regulador de la competencia británico bloqueó el intento de Sainsbury's de fusionarse con Asda (filial de Wallmart), por 7.300 millones de libras. Coupe fue el artífice de este acuerdo y el precio de las acciones de Sainsbury's ha caído un 22% durante el último año.
"Esta ha sido una decisión muy difícil para mí personalmente", dijo Coupe. "Nunca es un buen momento para seguir adelante, pero a medida que nosotros y la industria continuamos evolucionando, creo que ahora es el momento adecuado para que dé paso a mi sucesor".
El nombramiento de Roberts para uno de los puestos de más alto perfil en el comercio minorista británico plantea la cuestión de si adaptará la estrategia de Sainsbury's que se estableció en septiembre y que fue diseñada para demostrar que el grupo podía prosperar por sí solo.
RECORTE DE CIENTOS DE PUESTOS DIRECTIVOS
La sustitución del CEO de Sainsbury's se conoce un día después de que la compañía anunciara el recorte de cientos de puestos directivos.
La británica dijo este martes que planea recortar cientos de puestos de trabajo de la dirección de la empresa, sin dar una cifra precisa.
Sainsbury's también afirmó que desde el comienzo de su año fiscal 2019-20 en marzo, su equipo de liderazgo senior se ha reducido en más de un 20%.
La salida de CEOs de grandes empresas, especialmente de las británicas, es una constante desde finales del año pasado. Dicen los expertos que el Brexit y sus consecuencias se están haciendo notar. Otros afirman que los que más mandan en las grandes compañías británicas prefieren irse ahora antes de que la salida de la UE sea totalmente efectiva y las cosas se compliquen aún más.
