- El 7 de abril arranca la campaña para solicitar el borrador de la Renta 2014
En los últimos años la Agencia Tributaria ha intensificado los controles para evitar el fraude fiscal. Aunque algunos casos de grandes empresas o millonarios han saltado a la luz pública, la mayoría del fraude reside en errores de pequeños empresarios por falta de asesoramiento o desconocimiento, según destaca la Memoria de la Agencia Tributaria.
Este 7 de abril arranca la Campaña de la Declaración de la Renta 2014 y es oportuno tener en cuenta una serie de consejos para evitar errores a la hora de validar el borrador de la Renta pero también en el momento de incluir modificaciones para pedir desgravaciones por diferentes circunstancias. Estos son los 10 fraudes o errores fiscales más comunes recogidos por El País:
1. La compra de un coche
Los empresarios o autónomos que adquieran un coche pueden deducirse el 50% del valor del vehículo, salvo que puedan justificar al fisco que destina más de ese porcentaje a su actividad empresarial. La Agencia Tributaria suele poner más pegas a los contribuyentes que quieren exceder ese porcentaje excepto a empresas de logística o del sector del transporte, según destaca Asefiget.
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2. Los gastos personales
No todos los gastos que realizan los autónomos y pymes son susceptibles de ser desgravados ya que pueden considerados como consumo personal. Hacienda rechaza todas las degravacaciones de ropa, comida y facturar desligadas de la propia actividad empresarial.
Otra de las prácticas habituales es cargar a una factura de la empresa obras que se realizan en el hogar particular, algo que también puede ser detectado por el fisco.
No todos los gastos que realizan los autónomos y pymes son susceptibles de ser desgravados
3. Gastos de viajes
Otro de los 'errores' más comunes a la hora de pasar las desgravaciones es incluir en los gastos empresariales las vacaciones familiares. Desde los técnicos de Hacienda aseguran que la Agencia Tributaria es capaz de detectar fácilmente esos gastos no deducibles ya que hay ratios e índices que avisan a las autoridades fiscales.
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4. El gasto en combustibles
Al igual que pasa con los gastos en comida o ropa, los gastos en combustibles y otros gastos en gasolineras no pueden deducirse ya que no se puede acreditar la identidad del comprador. Para poder optar a las deducciones es necesario presentar una factura.
5. Las hipotecas y las cuentas vivienda
Hacienda también está estrechando el cerco sobre los jóvenes (o no tan jóvenes) que se beneficiaron de deducciones fiscales por sus hipotecas de vivienda habitual y que ahora ya no viven en ellas. El hecho de no vivir en ellas de manera habitual puede suponer la pérdida de la deducción y una amonestación si el fisco lo detecta. Algo similar ocurre con los contribuyentes que contrataron una cuenta vivienda y finalmente no adquirieron un inmueble pero sí que se beneficiaron de las deducciones y no las han devuelto a Hacienda.
6. Los alquileres
Estar en régimen de alquiler en un piso también puede suponer una desgravación pero Hacienda es capaz de detectar si hay más de un inquilino. Si se trata de un piso compartido, todos los huéspedes pueden poner el pago mensual conjunto para deducirlo cuando debe incluirse la parte proporcional. Además, también se puede saber si una vivienda está siendo utilizada por los gastos de agua y energía.
7. Los hijos
Hacienda cruza sus datos con el Registro Civil para saber cómo está formada cada familia. De esta manera, los progenitores deberán dividirse la desgravación por hijo ya que no pueden desgravarse el 100% cada uno. Además, esas deducciones son válidas hasta los 25 años. A partir de entonces, Hacienda detecta que ya no debe haber esa bonificación.
8. Sociedades patrimoniales
Uno de los errores más comunes es facturar actividades profesionales a través de sociedades. Para que una sociedad obtenga las desgravaciones por gastos debe justificar que son los necesarios para obtener ingresos. Deberá acreditar todas las facturas y deberá hacerlo a precio de mercado, es decir, tributar por IRPF.
9. Subvenciones
La Agencia Tributaria tiene constancia de todas las subvenciones que un contribuyente puede cobrar y también diferencia entre las que son deducibles y las que no.
10. Premios y loterías
Los premios de la Lotería, ONCE y Cruz Roja están sujetos a una retención que evita tener que declarar estas ganancias en el IRPF, pero en el resto de juegos sí que hay que declararlas. Se trata de uno de los 'olvidos' más habituales detectados por Hacienda.
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