Paco Limón redescubre en 'Sesión salvaje' la época dorada del cine B español: "Antes había más libertad creativa"

"Antes había más libertad creativa", ha señalado Limón durante una entrevista concedida a Europa Press con motivo del estreno de este documental, que pretende recuperar del olvido a nombres del cine español que "han sido olvidados".

"Nos hemos criado con este cine en videoclubs, en cines de doble sesión. Queríamos recuperar las mejores películas y lo más representativo de este cine. Queríamos transmitir nuestro amor, es un documental hecho con tripas y corazón", ha manifestado Limón.

'Sesión salvaje' recorre la época dorada del cine de géneros en España, desde los westerns rodados en Almería a las películas de terror, pasando por "el destape" y el denominado cine quinqui, y supone un homenaje de la actual generación de cineastas a los profesionales del cine de serie B en España.

Entre otros, en este documental aparecen protagonistas de esta época, como Fernando Esteso, Mariano Ozores o Esperanza Roy, secundarios como Simón Andreu, Antonio Mayans o Álvaro de Luna, directores como Jordi Grau, Eugenio Martín o Javier Aguirre, así como los testimonios de representantes del cine actual, como Álex de la Iglesia o Nacho Vigalondo, quienes, según ha destacado Limón, deben "casi todo" a los maestros de la época.

En palabras del codirector de 'Sesión salvaje', el cine de los años 60, 70 y 80 estaba "muy conectado con el público y con el espectador", incluso "casi solapado con la sociedad", de manera que "reflejaba inmediatamente el cambio de la sociedad".

"Tras la muerte de Franco llegó la libertad y el cine lo tradujo con el destape. Se legalizaron los bingos y el divorcio y Mariano Ozores habló de ello. Si en mayo de 1982 había elecciones y las encuestas daban favoritos a socialistas, él ese verano montaba una película", ha dicho.

TARANTINO, ENTRE LOS FANS

Aquellas películas, que contaban en su mayoría con un presupuesto muy bajo, se están "recuperando" e incluso Quentin Tarantino rinde homenaje a Joaquín Romero Marchant de manera explícita en 'Érase una vez en Hollywood', tal y como ha indicado.

Aquel era un cine "más industrial" porque si se hacía una película "tenía que funcionar sí o sí en taquilla". "Se hacían como churros, un actor podía rodar cada mes una película y de género diferente", ha dicho Limón.

Este proyecto, producido por Enrique López Lavigne, Enrique Cerezo y Pablo Guisa Koestinger, ha sido galardonado en el Mórbido Fest (México), y ha visitado el Sitges Film Fest y la Semana de Cine Fantástico y de Terror de San Sebastián.

Preguntado acerca de cómo les ha afectado el paso del tiempo a estas películas, Limón ha señalado que 'Arrebato', de Iván Zulueta, "no envejece" y "es inmortal", mientras que '¿Quién puede matar a un niño?', de Chicho Ibáñez Serrador, es "absolutamente brillante" y cuenta con una "inteligencia increíble". "Son películas muy valientes porque había una libertad con la que ahora solo podemos soñar", ha dicho.