"La Fed no tiene alternativa para bajar la inflación, incluso si provoca una recesión"

Los expertos coinciden en que el endurecimiento monetario provocará menos crecimiento

powell fed mercado laboral portada

La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) aumentó este miércoles los tipos de interés un 0,75%, la mayor subida desde 1994. El banco central anticipó que los intereses seguirán subiendo hasta el 3,4% a final de año, lo que implica una subida adicional de 175 puntos básicos en las cuatro reuniones que restan a final de año.

Su presidente, Jerome Powell, anticipó que espera "una subida de 50 o 75 puntos básicos en julio", aunque añadió que ascensos del 0,75% en el precio del dinero "son inusuales y no serán habituales". En cualquier caso, señaló que "no cantaremos victoria hasta que la inflación esté bajo control hacia nuestro objetivo del 2%, aunque esto tardará un tiempo".

Además, la Fed recortó su previsión de crecimiento para 2022 por debajo del 2% y aumentó su estimación de la inflación PCE por encima del 5%. Y Powell reconoció que "hay factores que están tensionando los precios al alza, como la guerra de Ucrania, que no podemos controlar".

¿Cómo valoran los expertos la agresividad de la Fed para controlar la inflación? A continuación,A resumimos las valoraciones de los analistas.

LA FED NO TIENE ALTERNATIVA

Salman Ahmed, estratega en Fidelity International, comenta que "este endurecimiento agresivo de las condiciones financieras (que es significativamente mayor que las de 2013 y 2018, dada la mayor inflación) probablemente provocará una desaceleración seria y brusca del crecimiento en los próximos meses".

Este es uno de los principales temores del mercado. Que la Fed tenga que provocar una recesión para contener los precios, como hizo Paul Volcker en los años 80. "No queremos provocar una recesión", señaló ayer Powell en rueda de prensa, aunque no tenía otra opción que responder esto ante las preguntas de los periodistas.

"Seguimos siendo cautelosos e infraponderando la renta variable y el crédito. Los mercados de crédito siguen siendo vulnerables dado el alcance de la desaceleración y recesión que el actual endurecimiento inducido por la Fed puede precipitar", añade Salman Ahmed, algo que ya anticiparon hace unos días desde Rabobank.

Christian Scherrmann, economista jefe en EEUU de la gestora DWS, comenta que "la Fed está decidida a recuperar su credibilidad en materia de inflación y a mantener las expectativas inflacionistas bien ancladas con una política monetaria mucho más estricta para volver a adelantarse a la curva".

Este también es un gran problema para el mercado, porque el error de Powell al calificar la inflación como "transitoria" durante muchos meses ha supuesto un golpe a la credibilidad del organismo monetario. Bien es verdad que la guerra de Ucrania ha sido un factor que no figuraba en sus previsiones, pero en cualquier caso la Fed afronta una crisis de credibilidad.

"Con la inflación del IPC en un vergonzoso 8,6% y en peligro de subir aún más, la Fed probablemente siente que no tiene otra alternativa. Su reputación se ha visto empañada. Por lo tanto, ahora tampoco tiene otra alternativa que seguir con su orientación agresiva (hawkish), incluso si el resultado final es una recesión. Las posibilidades de que se produzca siguen en aumento", argumenta Scherrmann.

UNA RECESIÓN EN 2023

En la misma línea, los expertos de Link Securities afirman que "la cuestión ahora para los inversores es determinar si la contundente actuación de la Fed para contrarrestar la inflación es realmente eficaz, dado que los precios que más están subiendo son los de los alimentos y los de la energía, productos cuya demanda es muy inelástica; y no termina convirtiendo el escenario más que probable de estanflación en uno de recesión".

Desde el banco americano Citi, consideran "probable que la Fed siga sorprendida por una inflación demasiado alta. El mensaje es claro: la Fed planea subir rápidamente las tasas de política a una tasa terminal cercana al 4%. Ahora esperamos otra subida de tipos de 75 puntos básicos en julio, subidas de 50 puntos básicos en septiembre y noviembre y subidas de 25 puntos en diciembre, enero y marzo para llevar los tipos al 4-4,25% (frente a nuestra previsión anterior de 3,5-3,75%)". Es decir, la Fed subirá los intereses hasta tasas restrictivas para el crecimiento.

Aunque no todos los expertos coinciden. Desde Pantheon Macroeconomics, anticipan que la inflación dará un respiro a la Fed hasta la reunión de finales de julio y consideran más factible una subida de 50 puntos básicos en julio. "Los datos entrantes dejarán en claro que una acción tan agresiva es innecesaria. Esperamos que la Fed aproveche la oportunidad para retirarse de la exageración", señalan.

No piensan lo mismo en Danske Bank, que ha elevado su previsión de subidas de tipos a 75 puntos básicos en julio y 50 puntos básicos en septiembre, noviembre y diciembre. "Seguimos viendo riesgos sesgados hacia un endurecimiento más rápido y estricto dadas las perspectivas de inflación. Nuestro escenario base es que EEUU cae en una recesión en el segundo trimestre de 2023, pero el ritmo de aumento más rápido aumenta el riesgo de que comience antes", indican sus expertos.

Una previsión que comparten otros expertos como los del banco americano Wells Fargo, que ahora anticipan "una recesión suave a mediados de 2023". Por su parte, Moody’s Analytics ha reconocido que las probabilidades de un aterrizaje suave están disminuyendo.

Por lo tanto, ahora mismo la sensación del mercado es que una recesión es prácticamente inevitable a no ser que el principal factor que está tensionando los precios al alza, la guerra de Ucrania, encuentre algún tipo de solución negociada, algo que no parece probable a corto plazo. Así, es previsible que el sufrimiento para los mercados de renta variable continúe en los próximos meses.

Noticias Relacionadas
contador