Ya está en la parrilla de HBO Max “Matrix Resurrections”

Ha sido una de las películas más esperadas por los cinéfilos durante muchos años, pero es justo decir que después de tanto tiempo espera nos merecíamos algo mejor. Desde hace mucho, incontables fans del cine de ciencia ficción llevamos esperando un regreso a Matrix que nos quitarse el mal sabor de boca de sus dos secuelas. Lana Wachowski y Warner decidían cumplir nuestros deseos. Una de las grandes responsables de la obra maestra volvía con los grandes protagonistas de la trilogía original ofrecernos una película memorable. Algo que, desgraciadamente, ha quedado lejos de ocurrir.

Neo vive una vida normal y corriente en San Francisco mientras su terapeuta le prescribe pastillas azules. Hasta que Morfeo le ofrece la pastilla roja y vuelve a abrir su mente al mundo de Matrix. Con esa premisa se presenta una película que de arranque consigue seducir nos sin demasiadas dificultades. Y es que la cinta comienza apelando a la nostalgia, lo que siempre es una buena jugada. Si a ello le sumamos las interesantes dosis de humor, lo cierto es que durante los primeros minutos de Matrix Resurrections parece que vamos a vivir una experiencia única. Un espejismo.

La nueva entrega de Matrix no aportaba absolutamente nada. El filme se convertía en un batiburrillo de buenas ideas mezcladas sin ton ni son. Un desperdicio en toda regla. La cuarta entrega de Matrix pasaba entonces a ser una cinta absolutamente irrelevante, que es lo peor que le puede ocurrir a la secuela de la película que lo puso todo patas arriba. Una cinta decepcionante que está ya a nuestro alcance en la parrilla de HBO Max.