“Ella es tu padre”, otro horror de la televisión española

Eso de la edad de oro de las series de la televisión parece que nunca va a llegar a nuestro país. Pese a los encomiables esfuerzos de El Ministerio del Tiempo o Vis a Vis, se ve que la cosa no termina de calar. Parece que seguimos anclados en el camino de lo fácil. Como nadie ofrece nada mejor, al final el público se ve obligado a consumir lo que hay. No es que en España nos gusten productos de menor calidad que en otros países, sino que no se puede consumir otra cosa.

Estas semanas, aprovechando la vuelta del verano, innumerables series deciden hacer su puesta de largo. Así, Ella es tu padre se plantaba como una de las más ambiciosas producciones de debut.

Sergio (Carlos Santos) y Tomy (Rubén Cortada) son dos hermanos que años atrás triunfaron con un grupo de pop-rock, pero que ahora no pasan por su mejor momento; se han hecho mayores, ya no son tan conocidos y apenas tienen giras. Por si fuera poco, Sergio se ha divorciado de su mujer y no puede ver a sus hijos, y Tomy tiene en su mano la última oportunidad de retomar su carrera sacando adelante un musical.


Con el apoyo de Tomy, Sergio encontrará la solución a su problema: hacerse pasar por profesora de música en el colegio en el que estudian sus hijos y que dirige Carmen (María Castro). Transformado en Avelina, una entrañable señora, encontrará una peculiar manera de estar más tiempo con ellos, pero el reto será mucho más difícil de lo que pensaba, ya que nunca ha tenido ni jefes, ni compañeros, ni horarios fijos de trabajo. Además tendrá que ganarse la confianza de los alumnos, que no se parecen en nada al público entregado que le jaleaba en los conciertos.

Efectivamente, esta suerte de Señora Doubtfire se ha plantado en la parrilla española con cierto éxito de audiencia, pero con pobre resultado creativo. Su problema no es el parecido con la cinta de Robin Williams, sino la escasez de ideas y lo desatendido de la puesta en escena. Ni el buen hacer de actores tan inmensos como Carlos Santos, Belén Cuesta o María Castro son capaces de salvar de la quema el resultado final. Lástima…