Margot Robbie, algo más que una cara bonita

De la noche a la mañana se ha convertido en la mujer más deseada del planeta. Nadie puede discutir el talento de Margot Robbie. Cada nuevo proyecto se convierte en una prueba más que evidente de que tenemos estrella de cine para rato. Lo que pasa es que, cuando un atractivo es tan obvio como el de la rubia actriz, el riesgo de que se pase por alto su descomunal nivel interpretativo es más que claro.

Focus, La Leyenda de Tarzán o Escuadrón Suicida se convierten en claros ejemplos del calibre de la actriz. Ninguna de las cintas resultaba demasiado acertada, pero durante los momentos en los que Margot Robbie se dejaba caer por la pantalla, casi nos parecía que estábamos ante auténticos peliculones. La realidad es que en cada cinta en la que aparece, la actriz es lo mejor.

Por si todo esto no fuese suficiente, resulta que cada vez que abre la boca, Margot Robbie demuestra que es una chica muy inteligente. A sus 30 años, la actriz no desaprovecha la oportunidad de lucir su infinita sensualidad con cada nuevo trabajo, pero está siendo capaz de lograr que su capacidad interpretativa se sobreponga ante tan arrebatador físico. Que nadie se despiste con otras cuestiones: Estamos ante una actriz imponente. Su papel en la brillante Yo,Tonya era el enésimo ejemplo. La cosa se ha traducía en su primera y merecidísima nominación al Oscar. Es curioso que tuviese que producírsela ella para conseguir un papel de ese calibre… Llegarían después Érase una vez en… Hollywood y su segunda candidatura a los Oscar con El escándalo. Y es que Margot Robbie es una fuerza de la naturaleza de las que no se ven todos los días. El mundo está en sus manos.