Hablar de inquietante sería quedarse cortos. Estamos bastante acostumbrados a encontrarnos con autenticas infamias en el mundo del merchandising y de las figuras de películas, pero hay que decir que a Disney nunca se le había podido reprochar este tipo de cosas. Eso, porque todavía no habíamos visto lo que preparaban para La Bella y la Bestia.
Pocas veces habíamos vivido semejante torbellino de reacciones en las redes ante el lanzamiento de un juguete. No es para menos, ya que la versión de Bella que la compañía del ratón enviaba a sus tiendas rozaba lo terrorífico. Cualquier parecido entre Emma Watson y la muñeca en cuestión resultaba mera coincidencia. Ninguna princesa Disney de las tiendas de la compañía había sido tan capaz de provocar pesadillas.
Efectivamente, los comentarios en redes sociales se multiplicaban, llevándose la palma las comparaciones entre la muñeca en cuestión y Justin Bieber. Hay que reconocer que el parecido es sustancial…