Ya tenía pinta de que iba a triunfar a lo grande, pero el público ha dado el veredicto final. Desde hace tiempo, todos esperábamos ansiosos la llegada a Amazon Prime Video de La guerra del Mañana. La superproducción era de un calibre poco habitual en plataformas, por lo que la expectación era máxima. Así, el pasado 2 de julio era el momento y la cinta no decepcionaba, arrasando a lo grande.
Un día el mundo se paraliza cuando un grupo de viajeros en el tiempo se transporta desde el año 2051 para entregar un mensaje urgente: La humanidad está perdiendo la guerra mundial contra una especie alienígena letal. La única esperanza de supervivencia es que los soldados y los ciudadanos del presente sean transportados al futuro y se unan a la lucha. Entre los reclutados está el profesor de instituto y padre de familia Dan Forester (Chris Pratt) quien, decidido a salvar el mundo por su hija, se une a una brillante científica (Yvonne Strahovski) y a su padre (J.K. Simmons) en una búsqueda desesperada por reescribir el destino del planeta.
Puede que La guerra del mañana quede lejos de ser perfecta, pero de lo que no cabe duda es de que resulta tremendamente efectiva. Con un ritmo descomunal, la película nos atrapa hasta el punto de firmar una hora y media que roza lo brillante. Acción y terror se mezclan de la mano de un Chris Pratt capar de canalizar el tempo de la película como solo él sabe. Estamos ante el nuevo Harrison Ford.
Puede que el último acto de La guerra del mañana se vaya de las manos. Incluso es probable que la película hubiese sido impecable de despedirse en ese momento, pero la cinta es una joya inapelable de a ciencia-ficción.