Chile.- Chile formaliza su salida de la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR)

Ecuador es la nación depositaria del Tratado Constitutivo de UNASUR y, desde entonces, ha recibido las denuncias de Colombia, en agosto de 2018; de Paraguay, el 11 de abril; de Argentina, el 17 de abril y de Brasil también el 17 de abril. Desde que se presenta la denuncia, surte efecto a partir de los seis meses. En esta misma línea, Perú también ha dado los primeros pasos para la denuncia del Tratado.

En abril, el ministro de Asuntos Exteriores de Chile, Roberto Ampuero, admitió que revivir UNASUR era "completamente inviable" tras el abandono del bloque de otros cinco países de la región, después de que el mandatario chileno, Sebastián Piñera, anunciara pocos días antes su intención de retirar formalmente al país del grupo.

Ampuero subrayó que UNASUR se ha convertido en "un obstáculo adicional a lo que es la necesaria integración de Sudamérica" y que, por esa razón, "en ese escenario es completamente inviable revivirla", según indicó el Ministerio de Exteriores en un comunicado.

DESMORONAMIENTO DE UNASUR

En abril de 2018 Argentina, Brasil, Chile, Perú, Colombia y Paraguay anunciaron que dejarían de participar por un tiempo indefinido en la UNASUR, debido a que en su opinión el organismo ha estado acéfalo bajo la presidencia de Bolivia, lo que impide tomar decisiones.

Colombia anunció meses después su retirada definitiva, al asegurar que el organismo ha sido cómplice del Gobierno del mandatario venezolano, Nicolás Maduro.

Asimismo, el Gobierno de Ecuador anunció el pasado 14 de marzo su retirada de la Unión de Naciones Suramericanas al considerar que el ente regional se ha transformado en una "plataforma política", por lo que ha comenzado los procedimientos para su salida formal.

Uno de los factores que ha causado el desmoronamiento de UNASUR ha sido la crisis política en Venezuela, que se ha agravado a raíz de la decisión de Maduro de iniciar el 10 de enero un segundo mandato que no reconocen ni la oposición ni buena parte de la comunidad internacional.

Pocos días después, el 23 de enero, el jefe de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, se autoproclamó "presidente encargado" de Venezuela con el objetivo de derrocar al Gobierno de Maduro y capitanear una transición pacífica que desemboque en unas nuevas elecciones presidenciales.

Guaidó ha recabado el apoyo de la mayoría de los países de la región. De los integrantes de PROSUR, todos, menos Uruguay, le reconocen como mandatario interino de Venezuela.