ACCIONES EEUU SOBREVALORADAS. NO HAY QUE COMPRAR BONOS

Andrew Smithers, uno de los más afamados economistas a nivel mundial, ha comentado que la economía mundial está rebotando tan fuerte que hace muy improbable que veamos una nueva recesión en 2010 o 2011. Comenta que los principales riesgos son una rápida recuperación con crecientes expectativas inflacionistas y una mayor subida de los precios de los activos.
Sin embargo, Smithers cree que los más probable es que la recuperación sea relativamente lenta con una demanda limitada por las condiciones restrictivas en las condiciones del crédito.
Los márgenes de los beneficios en los Estados Unidos se encuentran en niveles récord. Esto es insólito durante una recesión y no tendremos dudas de que saldrán voces diciendo que esta vez es diferente y que los margenes de beneficio no descenderán aunque se hayan movido permanentemente en niveles altos. Smithers considera que, aunque casi todo es posible en la economía, parece extremadamente improbable que esto suceda y sería una mala apuesta para los inversores.
Los niveles récord de los márgenes en los Estados Unidos son particularmente altos entre las financieras. Esto refleja los extraordinarios bajos tipos de interés, los subsidios de los bancos centrales vía medidas no convencionales y los beneficios monopolísticos.
Los margenes de las empresas no financieras también están en niveles altos, aunque no tan exaltados.
Según Smithers, es probable que los beneficios en los Estados Unidos decepcionen las expectativas durante los próximos años ya que los margenes volverán a caer y existe una gran probabilidad de que esto ya suceda en 2010.
Añade que es probable que el empleo y los salarios reboten con fuerza en los Estados Unidos.
Con todo, considera que las acciones estadounidenses están sobrevaloradas y más aún respecto a otros grandes mercados de valores. Sugiere que los inversores deberían infraponderar las acciones EEUU en sus carteras. No ve ninguna razón para que los inversores mantengan bonos.
Andrew Smithers fundó Smithers & Co. en 1989, una firma consultora líder en asignaciones de activos internacionales dirigida a gerentes de inversiones. Antes de comenzar con Smithers & Co., Andrew estuvo en S.G. Warburg desde 1962 hasta 1989. Es un colaborador regular de la columna Nikkei Kinyu Shimbun's Market Eye y del London Evening Standard.