La caída del dólar impulsa el apetito de los inversores por las acciones internacionales
Los mercados bursátiles mundiales han superado a Wall Street desde que el mercado de acciones tocó fondo en octubre pasado. Como lo ve Jack Ablin, director de inversiones y socio fundador de Cresset, el probable catalizador de esto ha sido la caída del dólar, lo que refleja la opinión de los inversores de que se vislumbra un suelo en el endurecimiento de la Reserva Federal.
Cresset utiliza cinco factores al evaluar los mercados: valoraciones, contexto económico, liquidez, psicología e impulso.
Ablin dice que al tener en cuenta estos factores, "podemos ver que las valoraciones de las acciones internacionales son convincentes en relación con la historia". En resumen, Ablin cree que un argumento positivo está comenzando a unirse para las acciones internacionales desarrolladas. Dicho esto, las ganancias del primer semestre de 2023 le dan un poco de pausa.
"2023 será el año en el que el efecto de las tasas de interés más altas se sentirá en las economías y en las ganancias. Estaremos atentos a los informes de resultados y las perspectivas de esta temporada, buscando pistas de que el impacto de las tasas de interés más altas en las ganancias corporativas será débil. Hasta entonces, nuestras posiciones en oro continúan beneficiándose de la debilidad del dólar".
Aquí hay una recreación aproximada de uno de los gráficos de Ablin que muestra que el índice MSCI EAFE, un índice de acciones de mercados desarrollados de alta y mediana capitalización, excluyendo EE.UU. y Canadá, ha recibido un impulso en relación con el S&P 500 debido a la repentina debilidad del dólar:
