La Fed ante unas bolsas en máximos

Juan Carlos Ureta Domingo, presidente ejecutivo Renta 4 Banco

CapitalBolsa
Capitalbolsa | 18 mar, 2019 19:45
cbalcista82 short1

De todos los factores que han podido jugar a favor del extraordinario comportamiento de las Bolsas globales este primer trimestre de 2019, sin duda el más importante, el auténtico "game changer", ha sido el giro dado por la Reserva Federal americana. La Fed no es solo el Banco central americano, es además, en cierta forma, el Banco central global, y sus líneas de actuación condicionan a los restantes Bancos centrales, con la única excepción, tal vez, del Banco de Japón, que puede permitirse una política relativamente independiente.

Es cierto que los macro estímulos puestos en marcha por el Gobierno chino y el People's Bank of China (PBoC) y ratificados la semana pasada en la reunión de la Asamblea Nacional Popular del Partido Comunista chino, han tenido un impacto muy positivo en las Bolsas, al poner de manifiesto la determinación de las autoridades chinas de no dejar caer su ritmo de crecimiento por debajo del 6%. Es cierto también que los avances en el acuerdo comercial entre EE.UU. y China, debidamente tuiteados por Trump y jaleados por su economista y propagandista de cabecera, Larry Kudlow, han estimulado a los inversores, independientemente de que el acuerdo sea finalmente bueno o malo. Es, por último, cierto también que la mayor tranquilidad en Europa, siempre ayudada por los buenos oficios del BCE, que ha asegurado la liquidez de la zona rescatando el viejo instrumento de los LTRO y poniendo en marcha la tercera ronda de financiación a la banca, para asegurar que no habrá ningún episodio traumático en el siempre delicado equilibrio financiero del viejo continente.

Pero siendo todo esto cierto, lo que de verdad ha movido a los inversores, en particular a los norteamericanos, es el giro de la Fed. De hablar de tres o cuatro subidas de tipos de interés en el 2019 se ha pasado a decir que no habrá ninguna, e incluso a sugerir que el próximo movimiento será a la baja. Algunos analistas han puesto ya en circulación la idea de que la Fed podría estar contemplando poner en marcha, si fuese necesario, la fórmula de los tipos de interés nominales negativos que ha introducido en Europa el BCE.

Más allá de los tipos de interés, la Fed ha dejado claro que va a ralentizar o incluso a congelar su programa de reducción del balance, que inició en octubre de 2017. Los activos de la Fed alcanzaron 4,5 trillones de dólares (billones europeos) en su máximo en 2015, y se mantuvieron ahí hasta 2017, al ir renovando la Fed los activos que vencían. A fines de 2018 los activos eran del entorno de cuatro trillones, y Powell mostró en la rueda de prensa del 19 de diciembre su determinación a seguir reduciéndolos en la forma prevista, a cincuenta mil millones de dólares al mes. Era la fórmula del "piloto automático" que tan poco gustó a los mercados.

Pero claramente las turbulencias de las Bolsas en los últimos días de diciembre le hicieron cambiar de opinión. Pudo influir también, tal vez, el tuit de Trump urgiendo a la Fed de forma muy explícita a parar con su programa de reducción de cincuenta mil millones de dólares al mes de su balance. "Stop with the 50B?s" era el texto literal de aquel tuit de Trump. Sin duda la reducción de balance de la Fed tiene tanta o más importancia que lo que haga la Fed con los tipos de interés. Lo mismo pasa en el caso del BCE, como se ha visto con la vuelta a los LTRO. (Leer más)

contador