Suecia necesita otros 200.000 trabajadores para mantener su famoso estado del bienestar
Suecia tiene un gran problema de oferta y demanda. Para el año 2025, se espera que toda su fuerza laboral crezca en 207.000 personas; sin embargo, necesita más solo para el personal de su legendario estado de bienestar. El déficit de trabajadores podría hacer decaer los servicios y aumentar los costes laborales, especialmente en un entorno político menos hospitalario para la inmigración.
Esta discrepancia es uno de los mayores dolores de cabeza a los que se enfrentará el próximo gobierno de Suecia. Los precedentes anteriores no son un buen augurio. La fuerza laboral aumentó en 488.000 entre 2007 y 2017, con menos de un tercio de ese aumento absorbido por el sector público.
Unas autoridades locales que recluten a 208.000 trabajadores "no son un escenario creíble", dijo Annika Wallenskog, economista jefe de la Asociación Sueca de Autoridades Locales y Regiones. El verdadero riesgo es que los sectores público y privado terminen compitiendo por los mismos trabajadores, dijo.
El gobierno tendrá que presentar algunas ideas serias sobre cómo compensar la escasez de mano de obra en el futuro. La inmigración también se ha convertido en un tema especialmente delicado desde que el país volvió a imponer controles fronterizos tras la crisis de refugiados de 2015.
Suecia necesita acelerar la velocidad de la automatización, aumentar el empleo y reformar su estado de bienestar, dijo Wallenskog. De lo contrario, "no tendremos suficientes personas para seguir trabajando de la manera en que lo hacemos".